El año nuevo invita a hacer predicciones sobre lo que nos espera en los
 próximos doce meses aunque, como bien saben los inversores, los 
mercados tienen la mala costumbre de no seguirlas. Como afirma Nassim 
Taleb en su famoso libro ‘El cisne negro’ −publicado, muy oportunamente,
 en 2007− resulta extremadamente difícil prever acontecimientos 
inesperados que tendrán graves consecuencias. Sin embargo, si analizamos
 la historia reciente, encontramos a gente que lo vio muy claro… y a 
otros que no lo vieron venir. Repasamos a continuación algunas de las 
mejores y peores predicciones de los últimos 15 años, recopiladas por la
 CNBC.
 Tres que dieron en el clavo
 1. La triple burbuja de Robert Shiller. En 2000, 
cuando el mundo había enloquecido con las empresas de internet, Shiller 
predijo el estallido de la burbuja de las ‘punto com’. Cinco años 
después, el economista de Yale advirtió de que los elevados precios de 
la vivienda estaban generando una burbuja inmobiliaria. Y en 2007, se 
anticipó al colapso financiero. Por fin, en 2013, el comité del Premio 
Nobel decidió otorgarle (junto a otros dos economistas) el preciado 
galardón.
 2. Nouriel Roubini vaticina la crisis de las subprime.
 Si bien es cierto que Nouriel Roubini lanza predicciones con tanta 
frecuencia que es difícil que no acierte de vez en cuando, el 
diagnóstico que presentó en su discurso de septiembre de 2006 ante el 
Fondo Monetario Internacional es tan certero que llama la atención: “Lo 
que me preocupa ahora mismo es que el estallido de la burbuja 
inmobiliaria, que aún no hemos vivido, provocará una crisis bancaria 
sistémica que empezará con los prestamistas subprime −que ya están 
experimentado un incremento de los impagos y las ejecuciones 
hipotecarias− y se extenderá a otros bancos e instituciones 
financieras”, afirmó.
 3. La apuesta contrarian de John Paulson. Uno de los 
gurús más respetados en el mundo de los hedge funds, Paulson no dudó en 
ir en contra del mercado en 2007, cuando usó swaps de riesgo de crédito 
(CDS) para apostar 15.000 millones de dólares contra el efervescente 
mercado hipotecario subprime. Curiosamente, la hazaña pasó prácticamente
 desapercibida hasta la publicación del libro The Greatest Trade Ever 
por el periodista del WSJ, Gregory Zuckerman, en 2010.
 Y tres grandes errores
 1. La miopía de la Fed. Aunque Ben Bernanke pasará a 
la historia como una figura clave en la gestión de la Gran Recesión, lo 
cierto es que la falta de visión de la Reserva Federal con respecto a la
 amenaza que suponían las hipotecas subprime contribuyó a la debacle 
posterior. En un discurso pronunciado en marzo de 2007, el entonces 
presidente de la Fed afirmó que “aunque las turbulencias del mercado 
hipotecario subprime han generado graves problemas financieros para 
muchas familias (…) el impacto sobre la economía general y los mercados 
financieros parece estar controlado”. Poco tiempo después, el banco 
central y el Tesoro estadounidenses tendrían que embarcarse en programas
 milmillonarios para rescatar al sector financiero, de los seguros y del
 automóvil y pondrían en marcha un proceso de expansión cuantitativa sin
 precedentes.
 2. Meredith Whitney y los bonos municipales. Después 
de que una acertada predicción sobre Citigroup la convirtiese en 
estrella de Wall Street en 2007, Meredith Whitney afirmó en diciembre de
 2010 que el impago de entre 50 y 100 bonos municipales provocaría 
“cientos de miles de millones en pérdidas”, unas declaraciones que 
tuvieron una gran repercusión en el mercado pero que finalmente 
resultaron infundadas.
 3. Abby Cohen: ¿Crisis? ¿Qué crisis? Aunque la crisis 
financiera pilló desprevenidos a casi todos en Wall Street, sorprende 
que la estratega jefe de Goldman Sachs, Abby Joseph Cohen, mantuviese 
una opinión tan alcista como para establecer un precio objetivo de 1.675
 para el S&P 500 en 2008, cuando ya era evidente que todo se 
desmoronaba. Ese año, el índice registró una caída del 37% (y del 46% 
con respecto al objetivo de Cohen).
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