El Banco de España urge a las entidades financieras a rearmar el colchón de provisiones. El supervisor está reclamando a bancos y cajas que aceleren las desinversiones en activos no estratégicos para generar nuevas plusvalías con las que recomponer sus reservas, especialmente la dotación genérica, la despensa que ayuda a cubrir los riesgos futuros.
Las previsiones que hace un año apuntaban que el sector vería lo peor de esta crisis en 2010 se han venido abajo y está interiorizada la idea de que pintan bastos hasta 2012. Se espera que el margen de intereses de la banca disminuya un 15% cada año entre 2010 y 2012. Y con la certeza de que la morosidad, aunque a ritmo más lento, aún seguirá subiendo desde el 5,5% actual, la consigna del regulador es nítida: hay que hacer caja y llenar las alforjas, ante la persistencia de la incertidumbre económica. “Todos tenemos que vender lo que nos quede, a unos más y a otros menos”, dicen en el sector, donde algunas entidades resaltan que en los próximos meses deberán acelerar el consumo de provisión genérica para esquivar las pérdidas.
Del colchón anticíclico, propio del sistema bancario español, se han empleado ya 18.200 millones desde 2008, según el Banco de España. En 2007, con una tasa de mora del 0,84%, las provisiones totales de la banca rozaban los 35.000 millones de euros. El 18% era dotación específica para cubrir préstamos impagados y el resto, colchón genérico. En la actualidad, hay 61.100 millones en provisiones para créditos, de los que más de 37.000 millones (60,5%) son fondos específicos.
Las reservas, además de por la dureza de la crisis, ahora también notan la presión de la nueva circular de provisiones del Banco de España. La normativa, presentada en mayo y puesta en marcha el 1 de octubre, ha acelerado el calendario de cobertura de los impagos (deben dotarse al 100% al cabo de doce meses) y ha aumentado la provisión de la cartera de inmuebles. Ahora alcanza el 30% del valor de la vivienda a los dos años de su entrada en balance.
La nueva norma se ha traducido, en la práctica, en mayores exigencias de dotaciones a corto plazo, un esfuerzo que muchas entidades ya están cargando contra la provisión genérica. Entre junio y septiembre, ésta ha pasado, por ejemplo, de 765 millones a 302 millones en Caja Madrid. En Banesto también ha disminuido en tres meses de 652 millones a 370 millones.
El mayor impacto de la circular, en cualquier caso, aún está por llegar. Los trabajos que el supervisor realizó antes del verano para calibrar las consecuencias de la implantación de la nueva regulación muestran que las exigencias de provisiones del sector aumentarán este año un 2% y hasta un 7% en 2011.
El próximo año vence gran parte de la cartera inmobiliaria de bancos y cajas, que se eleva a unos 60.000 millones de euros. Las entidades han recibido en 2010 la primera avalancha de viviendas procedentes de adjudicaciones judiciales (entre 100.000 y 150.000 inmuebles), pero fue en el primer semestre de 2009 cuando se produjo el pico de las compras a promotoras. Gran parte de los activos adquiridos a las inmobiliarias con dificultades cumplirá en 2011 más de dos años en balance, lo que multiplicará las exigencias de provisiones.
Plusvalías realizadas
Desde 2007, la banca ha generado ingresos atípicos por más de 20.000 millones con los que ha reforzado su balance (ver gráfico). Las entidades han vendido redes de oficinas y también parte de sus participaciones en cotizadas, donde las cajas aún tienen posiciones con un valor de mercado de 25.000 millones. Se han vendido negocios como los seguros o las gestoras de valores y fondos, y también se han obtenido extraordinarios con la recompra de emisiones de deuda que están cotizando por debajo de su precio de emisión.
“Cada vez es más difícil cerrar operaciones y hacerlo a un buen precio”, explican en una entidad.
fuente: http://www.expansion.com/2010/10/26/empresas/banca/1288044250.html
No hay comentarios :
Publicar un comentario