Me preguntan: ‘¡Vaya!. España está a punto de ser intervenida. ¿Está mucho peor la economía española?’. Veamos.
Los políticos, que son los que informan de estas cosas a la opinión pública, cuando lo hacen hablan de fotogramas, no explican la película completa, es decir, aíslan imágenes: ‘la situación hoy’, ‘la situación de Febrero’, ‘la herencia recibida’, pero no cuentan la secuencia de hechos, y no lo hacen porque esa secuencia es mucho más terrible que las fotos una a una.
La economía española -o la francesa o la uruguaya- está hoy tan bién o tan mal como estaba la semana pasada, o hace dos meses o en Octubre del 2011, o a finales del 2010. A no ser que se produzca un cataclismo de una dimensión semejante al sucedido el pasado año en Japón todo en economía se mueve por tendencias, y las tendencias no varían ni en días ni es semanas. La economía española está más que fatal, pero la verdad es que ya está así desde que empezó a variar la tendencia de evolución de los precios de venta de la vivienda en Marzo del 2006. Y sí, claro: desde que Carlos V decidió gastarse la plata expoliada de América en guerras de familia por Europa, pero no nos vayamos tan atrás.
La economía española está más que fatal por cuatro motivos que podrían denominarse los motivos madre: 1) España tiene un montón de entidades financieras cargadas de unos activos contabilizados a un valor muy superior al de mercado y, junto a eso, esas entidades conviven con una altísima probabilidad de impago de lo que les deben por parte de quienes se lo deben, 2) España crece lo necesario para ‘ir bien’ si construye pisos, si ensambla muchos automóviles, si atiende a muchos turistas y si el Estado tiende muchos AVEs, gracias a lo cual ocupa a mucha población activa, 3) España, para hacer todo eso, precisa de un enorme y permanente flujo de crédito porque no ingresa lo suficiente, ni el país, ni sus empresas, ni sus familias, y 4) España tiene una porrón de empresas con una bajísima tasa de inversión porque a esas empresas no les sale a cuenta invertir teniendo en cuenta el valor de lo que fabrican y la cantidad que fabrican, razón por la que la productividad española es muy baja y solo aumenta si esas empresas se desprenden de factor trabajo.
Esos cuatro motivos no aparecen ayer, ni hace dos meses, ni hace dos años. Que el Gobierno del Sr. Mariano Rajoy hable de ‘herencia recibida’ equivale a hablar de la situación que recibieron de los Gobiernos de los Sres. Adolfo Suárez, Calvo Sotelo, Felipe González, José María Aznar y, evidentemente, Rodríguez Zapatero. Esos motivos España siempre los ha tenido porque son sus hijos, son consustanciales a su estructura, lo que sucede es que, en ocasiones, la realidad los camufla, como en el período 1988 – 1992 o la fase 2002 – 2007. Repito: se camuflan, se difuminan, se enmascaran, pero nunca se eliminan porque nunca se resuelven ya que para ello tendría que cambiar la estructura de España.
Pero España tiene otra característica: su volumen. España es una economía no-pequeña. Un PIB de un billón puede hacer mucho daño si las cosas se descontrolan, y a la vez, un PIB de un billón imposibilita el rescate al modo griego o irlandés: la cantidad de pasta que haría falta teniendo en cuenta el volumen de deuda total de España rondaría los 0,8 B€, y tan cantidad no está disponible.
España, ya lo han leído aquí, pienso que no va a ser rescatada porque es imposible rescatarla. Y España no va ser intervenida porque ya lo está, ¿o es que alguien se ha creído que por la cara bonita de España Europa le ha autorizado a que incumpliera el compromiso de déficit del -6,0% para el 2011?. España ya está vigilada, monitorizada, pero los MiB aún no han aterrizado con sus Black Hawk en el jardín de La Moncloa, aunque pienso que para eso falta muy poco.
Tiene toda la razón el Sr. Luís de Guindos cuando dice que los recortes son mucho más peores si los hace otro. Que se lo pregunten al Sr. José Sócrates Carvalho Pinto de Sousa, Primer Ministro de Portugal que intentó evitar a toda costa el rescate de la economía portuguesa y la llegada de los MiB para dictar todo lo que había que hacer: lo que ha venido después en Portugal ha sido peor, y encima sin soberanía, y además sin crecimiento.
España se está portugalizando: no crece, no recauda, tiene un déficit tremendo, debe la tira, sus bancos tienen una cantidad desconocida de porquería, la estructura de gastos corresponde a la época del ‘España va bien’, el desempleo no cesa de aumentar, la recaudación fiscal no es suficiente, y volvemos al inicio: España no crece. España llevaba así años, pero la crisis sistémica ha acelerado la desconfianza hacia las economías más débiles a medida que se ha ido asumiendo que no hay una salida ni rápida, ni fácil, ni suave, para nadie: los Países Bajos tienen problemas, muchos, pero si Uds. fuesen brokers que moviesen sus inversiones por todo el planeta, ¿de quién desconfiarían más, de España o de los Países Bajos?.
España pienso que no será rescatada, pero pienso que sí será selectivamente intervenidos algunos de los elementos de su economía, así como sus presupuestos: tanto el de gastos como el de ingresos y ciertos aspectos de su administración territorial.
Eso hará que España gaste lo que ingrese y pague lo que debe, pero España crecerá muy, muy poco, zonalmente, y se empobrecerá, mucho. Vuelvo a repetir: recuerden Portugal. Piensen a medio plazo en una ‘L’.
Y no olviden que esta es una crisis sistémica: lo que haga cada uno afecta a los demás, y ninguno puede hacer nada efectivo si lo que hace no es consecuencia de una coordinación como poco europea. Pero pienso que para llegar aquí todos, España incluida, evidentemente, tienen primero que ir más peor.
(Yo no he hecho el símil: como al Sr. Sócrates le pasó lo que le pasó …; pero vuelvo a decir que pienso que España precisa un Gobierno de concertación nacional en el que también participen los Sindicatos y las patronales empresariales. O eso o sigo pensando que este Gobierno no llega a Noviembre, claro que si preguntar la hora a un miembro garantizador del orden público puede ser calificado como delito de agresión, tal vez aguante un poco más).
::: :::
¿Para qué sirven las campañas electorales?. El partido en el Gobierno, ya saben, no ganó el 20 N: fue aclamado. ¿Lo hubiese sido si en su programa y en sus mítines hubiese hablado de la reforma laboral que ha hecho, de los recortes y subidas de impuestos por 35.000.000.000 que ha hecho / va a hacer este año, y de que se tiene que ir a un déficit cero sí o sí?. … puede que si, … puede que si).
::: :::
Limitar el uso de efectivo. ¿Y si el origen de tal efectivo es blanco, puro y cristalino?.
(Fe de erratas. Me escribe un lector desde Canarias: "En el cuadro de la regiones no incluyó ni a Canarias ni a La Rioja". Ciertísimo. Lo único que se me ocuurre es que, o bien se me pasaron (difícil: son dos olvidos) o bien el día que tomé los índices de Eurostat, por algún motivo, esas dos regiones no figuraban, lo que parece bastante inverosímil. En cualquier caso pido disculpas a los lectores de ambas regiones).
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.
No hay comentarios :
Publicar un comentario