¿Quieren saber si las bolsas van a subir? Miren al cobre

Hoy les hablaré del cobre. Les puede parecer raro el asunto de este artículo, pero este metal es uno de los mejores indicadores técnicos adelantados que existen sobre la economía. El uso industrial del cobre es muy elevado, y tiene un papel relevante en multitud de actividades económicas: Sector eléctrico, telecomunicaciones, transporte, constructor, ornamentación…

La correlación entre la evolución del precio del cobre y la de los principales índices generales de acciones es elevada. La razón es obvia: Un aumento de la demanda de cobre es un claro indicativo que la actividad económica se está acelerando y viceversa.

Los gestores utilizamos el análisis de los gráficos del cobre para intentar anticipar la evolución de las bolsas. Normalmente los movimientos del cobre se anticipan a los de la renta variable y a los bonos.
Dicho esto ahora les expondré unos gráficos elaborados por Short Side of Long.
Como vemos en el primer gráfico el precio del cobre lleva cayendo desde los máximos alcanzados en 2010 cuando hizo un máximo en los 4,65$ por onza. El cobre lleva media década cayendo sin un rebote de importancia. Por otro lado, según los últimos datos de la Commitment of Traders, los fondos de cobertura y otros especuladores vuelven a presentar fuertes posiciones cortas en el metal. Y para completar este escenario, los índices de sentimiento inversor muestran que el optimismo sobre el cobre ha caído por debajo del 20% por primera vez en quince años.

En este gráfico por el contrario vemos que los precios del cobre ha alcanzado una tendencia alcista principal iniciada en 2003. La presión vendedora en los últimos meses se ha acelerado, alcanzando niveles claro de sobreventa.

Conclusiones:
- Los índices de sentimiento muestran un extremo pesimismo sobre el cobre.
- Los especuladores profesionales tienen fuertes posiciones bajistas que podrían recomprar de forma violenta ante cualquier vuelta del precio.
- Existe una clara sobreventa.
- El precio del cobre ha alcanzado un importante soporte –línea directriz alcista mayor.
Se dan por tanto, todas las condiciones para un fuerte rebote de este metal, que podría anticipar a una nueva onda alcista en los mercados de valores. Veremos.