lunes, 30 de marzo de 2015

Este número puede predecir la burbuja bursátil

Ya que el mercado alcista en acciones y bonos no muestra signos de desaceleración, los inversores están tratando saber cuándo ocurrirá el próximo crash. No solo La Carta de la Bolsa. Los medios financieros en estos días están llenos de un mensaje contradictorio: el crecimiento está llegando y es el momento para invertir, hasta que todo finalice como lo hace casi siempre, con un descenso abrupto.

La única pregunta es cuándo.

Es en este clima actual, el Centro para la Estabilidad Financiera (CFS) emitió un informe a finales del mes pasado sobre la liquidez de los mercados financieros. Sin unos buenos conocimientos financieros o económicos, el informe puede ser difícil de entender, pero básicamente mide los fondos del mercado monetario, los acuerdos de recompra y papeles comerciales - los instrumentos que le dan al sector privado el crédito, o capacidad, para expandirse. Piense en ello como el camino del mercado privado para imprimir dinero.
El CFS encontró que el crédito a corto plazo, creado y comercializado fuera del sistema bancario, se expandió ligeramente entre enero y febrero. Eso es notable, como explica Michael Casey de The Wall Street Journal, porque es la primera vez que sucede desde el colapso de Bear Stearns en marzo de 2008 y puede ser algo positivo porque "la demanda de este tipo de instrumentos de crédito podría ayudar a impulsar la economía a través del mercado del papel comercial".

Un mercado de crédito activo le quitaría presión a la Fed para proporcionar dinero barato. El libre mercado estaría trabajando de nuevo para lo que fue diseñado, dice David Weidner de MarketWatch.

"El crédito a corto plazo solía ser de la competencia principal de los bancos, pero redujeron su participación debido a los cambios del entorno y las nuevas regulaciones que se promulgaron como parte de la Ley Dodd-Frank de 2010. Si está familiarizado con el término "banca en la sombra", es ahí donde se está creando ese nuevo dinero.

Así que el hecho de que esta parte del sistema de crédito esté creciendo lentamente se puede tomar como un hecho positivo. Esto demuestra la inversión de los prestatarios (en su mayoría empresas), y la confianza de los prestamistas (bancos, fondos y otras instituciones).

Eso significa que el reciente aumento de estos productos de crédito es una buena señal de que los mercados financieros se están moviendo de nuevo en el equilibrio. Los inversores y las aseguradoras privadas están regresando para dar un respiro a la Fed.



En el corto plazo, esto es, obviamente, algo bueno. Pero hay un límite. Si observan el gráfico adjunto (arriba), se puede ver que este mercado comenzó a explotar durante los años de la burbuja que condujeron a la crisis financiera y la Gran Recesión. En 2000, se desvió muy por encima de la línea de tendencia (al igual que los precios de la vivienda). En el año 2008, era un mercado 7,5 billones de dólares, sobredimensionado en un 50%, de acuerdo con los estándares históricos.

Hoy en día, el mercado de crédito bancario en la sombra está en 4,12 billones de dólares. Esto sigue estando más de un 40% por debajo de la línea de tendencia. De hecho, esto hizo que el presidente del CFS Lawrence Goodman escribiera en el mismo informe: "el mundo está plagado de una escasez de liquidez en el mercado financiero a pesar de un exceso de liquidez del banco central".

Así que el mercado no sólo tiene tiempo suficiente y capacidad para elevar de forma segura este número, tiene que elevarlo. El peligro viene una vez que el crédito otorgado por bancos en la sombra se acerca o cruza la línea de tendencia a largo plazo. Al ritmo actual, esto no va a suceder hasta dentro de unos años, pero el préstamo se acelerará una vez que las tasas de interés suban y la financiación privada se convierta en la opción más asequible para los prestatarios.

Una vez que el crédito bancario en la sombra cruce la línea, los inversores deben saber que es probable que se acerque el final. También deben tener en cuenta que estas no son instituciones reguladas como los bancos. Así que podrían colapsar en cuestión de meses, semanas o días. También, están ligados a los bancos a través de acuerdos de contraparte que se ejecutan en ambos sentidos.

En última instancia, mantener un ojo en la cantidad de crédito que asumen las entidades no bancarias es un buen indicador para los inversores. Si hay una lección que nos deja la crisis financiera, es que cuando Wall Street comienza a elevar el riesgo, probablemente debería reducir el suyo."

Fuentes: David Weidner

Los mercados alcistas no mueren de viejos

Una larga expansión es un argumento convincente para comprar acciones a pesar de que el PER fuera históricamente alto. Los inversores tienden a estar dispuestos a pagar más por las acciones si perciben que la expansión económica podría durar algunos años más. Cuanto más tiempo tengamos hasta la próxima recesión, más tiempo habrá para que crezcan las ganancias y justifiquen las valoraciones. La exposición anterior fue realizada recientemente por el prestigioso analista y gestor Ed Yardeni.
Yardeni añadió que si una recesión es inminente, las acciones obviamente deben ser vendidas de forma inmediata, especialmente si tienen un PER alto desde el punto de vista históricos. Los mercados alcistas no mueren de viejos, son asesinados por las recesiones.
Yardeni analiza el índice de indicadores coincidentes (CEI) para tener una orientación histórica sobre la longevidad de las expansiones económicas. Los resultados son los siguientes:
- El CEI tardó 68 meses, desde enero de 2008 hasta octubre de 2013, en recuperarse de la severa caída anterior durante 2008 y principios de 2009. Los cinco períodos de recuperación anteriores promediaron 26 meses, en un rango de 19 a 33 meses.
- El incremento medio del CEI tras cada uno de esos períodos de recuperación fue del 18,6%. Si aplicamos ese promedio al ciclo actual, el CEI alcanzaría su máximo en 48 meses más en marzo de 2019. Una ganancia sustancial desde los actuales niveles.
- Los cuatro componentes del CEI (nóminas laborales, ingreso personal real menos los pagos de transferencia, producción industrial y ventas comerciales), están en niveles récord.
Cuáles son las conclusiones de Yardeni:
- Las acciones no están baratas.
- Hay buenas razones para comprar de todos modos.
- La expansión podría durar hasta marzo de 2019.
- Las valoraciones están dentro de los promedios históricos.

viernes, 27 de marzo de 2015

La remuneración de los empleados públicos

Hoy y mañana vamos abordar un tema polémico, muy polémico: la remuneración de los empleados públicos. La causa de la polémica, pienso, es que, tradicionalmente, el tema se ha abordado de forma parcial, sesgada, incompleta. Lo que he escrito lo he elaborado a partir de un estudio realizado por un alumno hace un par de semanas. (Fuente de todos los gráficos:)
Este primer gráfico recoge, por un lado, la evolución del poder adquisitivo de los empleados públicos en España entre 1981 y el 2014; por otro la evolución del nivel de precios. Ambos tomando como referencia el índice 100 en 1981.


Pienso que no hace falta darle muchas vueltas a las conclusiones: desde el inicio de la serie los empleados públicos en España han ido perdiendo poder adquisitivo real de forma progresiva, creciente, continuada; pérdida que se ha acelerado tras las congelaciones y reducciones de estos últimos años.
Podría chocar esta realidad con esa otra que dice que, para trabajos equivalentes, las remuneraciones del sector público son superiores que las del privado; pero pienso que no se produce tal choque: suponiendo que las comparaciones se hayan hecho homogéneamente, lo único que indicaría tal conclusión es que los trabajadores del sector privado habrían perdido más poder adquisitivo que los del público.
El segundo gráfico muestra la evolución acumulada del poder adquisitivo de los empleados públicos desde 1982.


Lo evidente: en estos 32 años los empleados públicos españoles han sufrido una caída en su poder adquisitivo del 38,8%. Una exageración sólo compensada por la facilidad en el acceso al endeudamiento de la que ‘gozó’ la población española desde mediados de los 90 y, sobre todo, desde el 2001.
Las caídas son en cascada, incontenibles, tan sólo se producen pequeñas recuperaciones entre el 91 y el 93 –coincidiendo con el boom olímpico y el de la Expo– y entre el 2007 y el 2009 como eco rezagado de la época anterior.
Los dos problemas fundamentales que experimentan los salarios en España son, por un lado, que, salvo excepcione contadas, de por sí son bajos debido a que lo es el valor añadido generado; y por otro, que la inflación habitualmente ha sido elevadísima y ello ha afectado muy negativamente a unas rentas que, la mayor parte del año, pueden ser consideradas como fijas.



Bien. Introduzcamos otra variable: los salarios totales. El gráfico mostrado a continuación recoge, tomando como índice 100 el valor en 1992, de la evolución en España de losprecios, la mediana de los salarios y el salario público medio.
Ya desde el principio tanto el salario mediano como el salario público ha ido por detrás de la evolución de los precios. Lo fueron antes de la fase del ‘España va bien’, durante dicha fase, y con posterioridad ya en la crisis, de hecho las mayores diferencias se dan durante la crisis. Y curiosamente, la caída en los precios no beneficia ni siquiera mínimamente a los salarios de los empleados públicos debido a la congelación que estos han experimentado. Nuevamente se aprecia que fue gracias al acceso masivo al crédito como pudieron los asalariados introducirse en la fase del consumo masivo, a la vez que son evidentes los problemas que hoy los asalariados tienen para hacer frente a sus deudas.
Como resumen un gráfico aún más demoledor si cabe: la variación del poder adquisitivo de todos los asalariados y de los empleados públicos en España respecto al valor que ambos tenían en 1992 y que se ha igualado a 100.


En 19 años, el poder adquisitivo de los asalariados españoles ha aumentado 19,54 puntos porcentuales, aproximadamente y redondeando a un punto por año, y netamente por debajo de la inflación como anteriormente se ha puesto de manifiesto; pero es que el poder adquisitivo de los empleados públicos por separado se ha hundido la friolera de 34,49 puntos.
Es decir, un empleado público medio que en 1992 percibía 100unidades salariales, en el 2011 estaba percibiendo 65,51 en términos reales. Nótese que en el período 1992 – 2011 han estado gobernando partidos de diferente color.
¿Dónde está el megachollo de ser empleado público? ¿En que el empleo es para siempre?. Eso sólo para una parte, y en todos los casos alguna vez han sido señalados como holgazanes y estigmatizados por ser portadores de una canonjía. Y no, no me estoy reivindicando: la URL es un centro totalmente privado.
En España la valoración que en las últimas décadas se ha hecho del factor trabajo ha sido progresivamente a la baja, ‘compensada’ por la concesión, fuera de toda lógica, de crédito prácticamente ilimitado. Eso ha sucedido en todos los sectores y a todos los trabajadores, pero en el caso de los empleados públicos ha sucedido más. Y eso no se ha reconocido.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

jueves, 26 de marzo de 2015

Los 5 gráficos que muestran que Europa está cerca de un boom económico

Dondequiera que miremos en los mercados financieros, hay evidencias de la debilidad económica de la zona euro, mientras que los EE.UU. están en una trayectoria suave hacia la recuperación. Pero si profundizamos en algunos de los datos económicos europeos recientes, hay sorprendentes signos de vida que vislumbran un panorama brillante para el viejo continente.
En primer lugar, el pesimismo. En el mercado de divisas, el euro ha perdido el 20 por ciento de su valor frente al dólar en el último año. En las acciones, el índice S&P 500 de Estados Unidos ha superado al índice Stoxx Europe 600 en más del 15 por ciento cuando ambos índices se miden en dólares; la diferencia a un año está más cerca del 20 por ciento en euros, señala Mark Gilbert de BloombergView. "Y en bonos, las preocupaciones de deflación provocan que los inversores estén dispuestos a pagar un 0,07 por ciento por el privilegio de prestar dinero al gobierno alemán durante cinco años, mientras que Estados Unidos proporciona un 1,4 por ciento.

Y ahora las buenas noticias. Aunque los libros de texto sugieren que la deflación - definida como un período sostenido de caída de los precios - hace que los consumidores retraigan el consumo porque esperan obtener mejores gangas en el futuro, eso no parece estar sucediendo en la región del euro. En enero, los consumidores impulsaron las ventas minoristas un 1,1 por ciento en el mes, superando el incremento del 0,2 por ciento pronosticado por los economistas. La cifra anual del 3,7 por ciento fue el crecimiento más elevado en casi una década, y superó las expectativas de los economistas de un aumento del 2,3 por ciento.
Ventas al por menor


En paralelo con el aumento de las ventas minoristas, la confianza del consumidor también está mejorando a un ritmo rápido. La menor inflación parece estar haciendo que las personas tengan una mayor confianza sobre su futuro económico, en lugar de mantenerlos alejados de las tiendas. Un buen augurio para las perspectivas de crecimiento del producto interior bruto.
La confianza del consumidor


Luego está la encuesta de confianza que la Comisión Europea lleva a cabo cada mes entre 23.000 hogares. Aunque el saldo negativo de la encuesta muestra que los pesimistas todavía superan a los optimistas, la lectura de marzo de -3,7 superó la cifra -5,9 pronosticada por los economistas. Esto refleja una tendencia persistente en los últimos meses: Los economistas han errado continuamente por el lado de pesimista, y las cifras han sorprendido al alza. Por el contrario, los analistas han sido tenazmente demasiado optimistas sobre la economía estadounidense, como muestra el índice de Sorpresas Económicas de Citigroup
Índice de Sorpresas Económicas


En la economía en general, algunos datos sobre la oferta de dinero sugieren que el crédito está a punto de fluir de nuevo. Hace casi una década, cuando Juergen Stark era el principal representante del Bundesbank alemán en el BCE, dijo que su gráfico favorito para obtener una instantánea de la salud de la economía de la región del euro era éste:
Oferta monetaria


El índice mide el cambio en el flujo de crédito en la región, y sugiere que no se ha expandido desde marzo de 2012; pero como las más recientes cifras del gráfico demuestran, el flujo ha vuelto a ser positivo en enero. Esto sugiere que la perspectiva del programa de flexibilización cuantitativa del BCE, comunicado con suficiente antelación, ya ha tenido el efecto deseado.

Este programa de compra de bonos también parece estar influyendo en las expectativas de precios. La medida favorita del jefe del Banco Central Europeo, Mario Draghi, de las perspectivas de inflación utiliza el tipo swap de inflación a cinco años, dentro de cinco años, que mide las expectativas de inflación de los traders y los inversores. Esa medida ha rebotado desde su punto más bajo incluso cuando los rendimientos de la deuda pública han profundizado su caída. La lectura más reciente se sitúa en el 1,7 por ciento desde el mínimo de 1,48 alcanzado a mediados de enero, y se acercaba al 2 por ciento del objetivo del BCE:
Swaps de inflación


"El crecimiento está ganando impulso", dijo Draghi en el Parlamento Europeo el lunes. Tiene razón. La pregunta es por qué - al igual que los economistas de la región - los mercados de bonos y divisas no han tomado nota."

Fuentes: Mark Gilbert


miércoles, 25 de marzo de 2015

Wall Street: En el nivel más caro de la historia excepto en el 2000

Meb Faber Research realizan la siguiente afirmación: Mi indicador favorito "ratio precio medio/ventas" está en el mayor nivel de la historia excepto en el 2000. El ratio se encuentra por encima de 2,0. Los datos señalan que cuando el S&P 500 tiene este ratio por encima de los 1,53 el rendimiento anual es del 0,60%. Si el ratio está entre 0,7-1,53 la rentabilidad anual es del 6,60% anual. Por debajo de 0,7 la rentabilidad anual es del 10,22%.

La tendencia alcista actual es totalmente anómala

¿Si un árbol se cae en el bosque cuando no hay nadie alrededor para escucharlo, realmente produce un sonido?, esta pregunta se la plantea Brian Portnoy, director de inversiones de Virtus Investment Partners, como introducción a una interesante reflexión que realiza sobre el mercado alcista actual. Portnoy continúa así:
Para mí, la respuesta es fácil: Sí. Un árbol que cae fuera del alcance del oído hace ruido, incluso si no estoy cerca para escucharlo. Entiendo que mis tímpanos no vibren ni un poco si no estoy en ese bosque en particular en ese momento, pero si lo estuviera, escucharía el accidente. El potencial está siempre ahí. 
La razón de este enigma arbóreo me vino a la cabeza al pensar en el mercado alcista actual de la renta variable estadounidense. Es obvio que estamos asistiendo a uno de los mercados alcistas más largos y fuertes de la historia.
Los datos son inequívocos. Dado que el S & P 500 tocó fondo en marzo de 2009 a 666 puntos, se ha más que triplicado desde ese nivel. Es el tercer mercado alcista más fuerte del siglo pasado. Y con más de 6 años de duración, el cuarto más largo de la historia moderna. La duración media de los mercados alcistas es de 3,8 años.
Pero hay una segunda dimensión a esta carrera alcista, y es el lado de la volatilidad. Este mercado alcista ha sido uno de los más tranquilos que jamás hayan existido. Como resultado es que muchos inversores tienen una baja percepción del riesgo.
Vamos a proporcionar un poco de perspectiva a los hechos. Hay una definición técnica de volatilidad, pero me gusta pensar en ella más coloquialmente como “el precio de admisión” por el viaje ofrecido por un activo financiero con el objetivo de generar ¿grandes retornos? Por lo general usted tendrá que soportar un viaje muy accidentado en activos de mayor riesgo y mayor rentabilidad esperada y un viaje más tranquilo en los activos con menor riesgo y menos potencial de beneficio.
Una forma aceptada para pensar en la rentabilidad ajustada al riesgo es el Ratio Sharpe, una medida de rentabilidad de un activo financiero dividida por la volatilidad de dicho activo y ajustada a los retornos del dinero en efectivo.
Un alto ratio Sharpe no significa que haya mayores rendimientos, sino que se han logrado con una volatilidad tolerable o incluso mejor.
El gráfico publicado arriba muestra el ratio Sharpe del S&P 500 de los últimos años. Vemos como la media de los últimos 35 años ha sido de 0,58. El máximo en ese periodo se alcanzó en noviembre de 2014 a 2,18, y a finales de febrero se situaba en 1,82.
En términos sencillos, podemos afirmar que la rentabilidad ajustada al riesgo de inversión en acciones de gran capitalización en EE.UU. nunca ha sido mayor en nuestra vida. No es normal que el S&P 500 tenga un Sharpe de más de 1,0. De hecho, no es normal que cualquier inversión durante largos períodos de tiempo logre ese nivel de rentabilidad ajustada al riesgo. A pesar de los esfuerzos de las personas más inteligentes en finanzas, muy pocos pueden sostener este tipo de rentabilidad ajustada. De hecho, casi nunca se ha visto de una forma legítima. Por comparación extrema, uno de los fondos de Madoff tenía un Sharpe de 2,73.
La conclusión que podemos sacar de este análisis de Portnoy es que la rentabilidad que está ofreciendo actualmente el mercado estadounidense, y gran parte de los europeos, es totalmente anómala. De hecho nunca antes en la historia moderna se había obtenido una rentabilidad tan elevada durante tanto tiempo con tan poca volatilidad. Precaución extrema.
fuente: http://lacartadelabolsa.com/leer/articulo/la_tendencia_alcista_actual_es_totalmente_anomala

viernes, 20 de marzo de 2015

Estamos más cerca de un mercado bajista de lo que pensamos

Estamos más cerca de un  mercado bajista de lo que pensamos, eso es lo que cree uno de los gestores más reputados y rentables actualmente: Jim Stack, presidente de InvesTech Research.
Stack ha recomendado a sus clientes que rebajen su exposición a bolsa al 76% desde el 80% anterior, colocando el resto en efectivo. Este es el nivel menor  de exposición a la renta variable desde que se inició el mercado alcista en marzo de 2009.
“Estamos probablemente en la última parte del mercado alcista y más cerca del final de lo que pensamos”, declaró Stack recientemente en una entrevista en MarketWatch. “Puede que incluso el último año. Podríamos ver el techo del mercado alcista en los próximos seis a nueve meses, sino se ha formado ya”.
En esa entrevista señalaba que si el mercado alcista continúa otro 5% adicional a los máximos del 2 de marzo, sería el tercer de mayor duración y de mayor magnitud de los últimos 80 años.
Stack destaca la exultante cobertura mediática a los últimos datos macroeconómicos, lo cual es una señal que antecede a los techos mayores de mercado.
Otro hecho que le preocupa son las crecientes presiones salariales, lo que forzará a la Fed a iniciar la normalización de tipos a un ritmo mayor del que quisieran.
“El aumento de los tipos de interés puede proporcionar importantes vientos en contra al mercado alcista. Uno de los mercados alcistas más sensibles a los tipos de interés que hemos visto en nuestra vida”, añade.
Otros factores que le preocupan son:
- El margen de la deuda ha alcanzado su punto máximo y comienza a caer: “Los picos anteriores en el margen de deuda han coincidido en el pasado con el inicio de los mercados bajistas anteriores”.
- Los inversores profesionales son extremadamente alcistas con el menor sentimiento bajista desde 1987, justo antes del crash.
- Las ganancias corporativas alcanzaron techo hace más de un año, pero las ganancias por acción del S&P 500 siguen aumentando. Esa discrepancia es a menudo un signo de alerta temprana.
- A pesar de que el S&P 500 cotiza actualmente a 19,9 veces ganancias que es un nivel ligeramente inferior a la media cuando las tasas de interés están por debajo del 3%, las acciones son especialmente vulnerables a subidas de tipos.
- Las empresas medianas estadounidenses cotizan a su más alta valoración de los últimos 65 años.
Jim Stack cree que el mercado bajista al que nos estamos acercando implicará caídas entorno al 35% desde máximos, algo preocupante teniendo en cuenta la solvencia de la persona que realiza esta afirmación.

La QE de Draghi está avivando el riesgo de burbuja de los bonos

Se supone que el mercado de bonos del gobierno es un lugar tranquilo, desprovisto de las emociones y los sobresaltos que caracterizan la renta variable. Pero ya no. Desde que los bancos centrales comenzaron a comprar bonos soberanos se han convertido tan emocionantes que los inversores han comprado más de 2 billones de euros en bonos con rendimiento negativos, principalmente en Europa. Incluso en la Depresión de la década de 1930 las tasas de interés nunca cayeron por debajo de cero. ¿Estamos viendo en esta rareza una burbuja en el mercado de bonos?
Algunos economistas sostienen que el bajo nivel actual de los rendimientos se justifica por los fundamentales, sobre todo si estamos ante un estancamiento secular, el ritmo de la innovación se está debilitando, y el déficit de demanda es tal que las tasas cercanas a cero de interés son incapaces de reactivar la economía, comenta John Plender en el Financial Times.
"Otros sugieren que la percepción sobre la magnitud y probabilidad de eventos extremos negativos ha cambiado desde la crisis financiera y los inversores que antes pensaban que una implosión del sistema financiero era un evento que se producía una vez cada 100 años, ahora pueden pensar que se producirá una vez cada 50 o 25 años. Esto proporciona una explicación plausible de por qué los rendimientos cayeron significativamente después de la crisis. Sin embargo, para que esto explique el fenómeno más reciente de los rendimientos negativos, se requeriría que la percepción del riesgo de una implosión financiera ha aumentado enormemente en este tiempo. Como alternativa, el cambio podría explicarse por las preocupaciones sobre el riesgo geopolítico. Pero ninguna de estas ideas parece totalmente convincente.
Una explicación más simple, es que un exceso de ahorro mundial se enfrenta a una escasez de activos seguros y que este desequilibrio entre la oferta y la demanda está siendo exacerbado por las compras de bonos del Banco Central Europeo. Alguien tiene que vender sus bonos para facilitar las compras del BCE por importe de 60 mil millones de euros al mes. Sin embargo, los candidatos obvios tienen pocos incentivos para hacerlo. En el caso de los bancos, los bonos del gobierno se asientan en el balance para satisfacer los requisitos reglamentarios para la liquidez. Cambiarlos por activos de mayor riesgo, lo que en parte busca incentivar la QE del BCE, no tiene ningún sentido para ellos.
Los bonos en manos de los fondos de pensiones son imprescindibles y su venta podría resultar en una cartera con un menor grado de concordancia. En cuanto a las compañías de seguros, también tienen requisitos reglamentarios que satisfacer. Y si reducen sus carteras de bonos existentes sólo pueden reinvertir en rendimientos mucho más bajos o con rendimientos comparables en activos con mayor riesgo. Eso no tiene ningún atractivo.
Eso no es lo que Mario Draghi, presidente del BCE, quiere después de haber tomado la inusual decisión de decirle al mercado que comprará bonos del rendimiento mientras el rendimiento esté por debajo de la tasa de depósito del BCE, que ahora está en el -0,2 por ciento. En otras palabras, se trata de un comprador forzoso. Como en cualquier burbuja, los inversores especulativos ahora invierten con la perspectiva de que habrá alguien que compre más caro. Los bonos más seguros de Europa, los bonos alemanes, liderarán el camino hacia una rentabilidad negativa. Y otros activos menos seguros seguirán ese mismo camino.
Si la esencia de una burbuja es que los precios pierden el contacto con los fundamentales, ese es el camino al que se dirigen los bonos soberanos. Los participantes del mercado reciclarán pagarés del gobierno en manos del banco central sin importar el riesgo relativo. Al mismo tiempo, la búsqueda de rentabilidad inducida por el banco central alcanzará nuevos niveles y creará nuevas distorsiones.
Es extraordinario que a pesar de las muy diferentes políticas monetarias que tienen los EE.UU. y la zona euro, los rendimientos de los bonos en ambos lugares descendieron después del anuncio de la flexibilización cuantitativa (QE) del BCE. Si los rendimientos negativos se extienden a vencimientos más largos en la deuda alemana, el diferencial de rentabilidad entre la deuda estadounidense y alemana provocará un mayor flujo de fondos al mercado americano de bonos. De hecho, el dicho tradicional que señala que los mercados mundiales bailan al son de Wall Street se está revirtiendo. Ahora hay una influencia crítica de los bonos de la zona euro sobre EE.UU. y el resto del mundo.
Todas las burbujas al final estallan. Hasta que eso ocurra Europa ofrece oportunidades de endeudamiento fabulosamente baratas, al menos para las grandes corporaciones. Si no logran traducirse en mayores niveles de inversión de capital, puede que la tesis de estancamiento secular necesite revisarse."
Fuentes: John Plender

jueves, 19 de marzo de 2015

Hace 15 años desde la burbuja tecnológica ¿Hemos aprendido algo?

Quince años pueden parecer mucho tiempo, y el año 2000 puede parecer un mundo diferente. En aquellos días felices de principios del milenio, en Estados Unidos la atención mediática la acaparaba el escándalo Lewinsky y la economía disfrutaba de un buen momento. Parecía que la economía "puntocom" iba a cambiarlo todo, con nuevas empresas de Internet que se disparaban en el mercado de valores todas las semanas.
Pero en marzo de 2000, hace 15 años, la burbuja de las puntocom, que se había estado acumulando durante los tres años anteriores, explotó. Las acciones se hundieron. Las empresas quebraron. Se perdieron fortunas, y la economía estadounidense comenzó a caer para terminar en una completa recesión.
Hoy en día, en medio de otro boom de las empresas tecnológicas, vamos a mirar hacia atrás para ver qué lecciones aprendimos (vía The Time).

El ascenso hasta la cima
La burbuja de las puntocom comenzó a crecer a finales de los años 90, mientras el acceso a internet se expandía y la informática era cada vez más importante en la vida cotidiana de las personas. Las ventas on-line fueron uno de los mayores impulsores de este crecimiento.
La inversión y la emoción sobre esta nueva tecnología provocaron que los valores bursátiles se dispararan al alza. El valor del Nasdaq se incrementó desde los 1.000 puntos de 1995 a más de 5.000 en 2000. Muchas empresas salieron a bolsa y alcanzaron precios astronómicos, muchas veces duplicando su valor el primer día de negociación. Fue uno de los grandes espejismos bursátiles de la historia y todo el mundo creía que podía ganar dinero.
 
El estallido
En marzo de 2000, todo empezó a cambiar. El 10 de marzo, el valor combinado de todas las acciones del Nasdaq era de 6.71 billones de dólares. El crash comenzó el 11 de marzo. Para el 30 de marzo, el valor del Nasdaq era de 6,02 billones. El 6 de abril de 2000, era de 5,78 billones. En menos de un mes, casi un billón de dólares se había evaporado por completo. Un analista de JP Morgan señalaba en abril de 2000 que muchas empresas estaban perdiendo entre $10 y $30 millones por trimestre - una tasa que era obviamente insostenible, y que iba a terminar con muchos sitios web quebrados, dejando a los inversores con grandes pérdidas.
Las empresas comenzaron a cerrar (Pets.com fue uno). Los grandes medios de comunicación comenzaron a publicar reportajes aconsejando formas de limitar su exposición al sector tecnológico, sintiendo que la gente iba a perder mucho dinero si estaban demasiado expuestos a los valores de internet.
Durante la Super Bowl de 2000, 17 empresas puntocom pagaron 44 millones de dólares en anuncios publicitarios, según un artículo de Bloomberg. En la Super Bowl de 2001, sólo tres empresas puntocom se anunciaron durante el juego.

¿Se repite la historia?
La sombra de la burbuja de 2000 se cierne especialmente ahora, cuando la economía está en otra época de gran crecimiento en el sector tecnológico. La empresa de comercio electrónico Alibaba registró la mayor opv de la historia el pasado otoño. Empresas como Uber, Palantir y AirBnB son "Unicornios" (empresas privadas con un valor de más de 1.000 millones de dólares, que se llaman así porque la gente pensaba que no podrían existir).
¿Estamos en otro estallido de la burbuja?
El empresario y dueño de los Dallas Mavericks, Mark Cuban cree que sí, argumentando recientemente en su blog que la diferencia entre la burbuja de 2000, y la economía de hoy es que la burbuja de hoy no es realmente sobre el mercado de valores. También incluye las inversiones privadas "ángel", que no se venden sólo como acciones. Y eso, dice, es un problema:
¿Por qué esta burbuja es mucho peor que la burbuja tecnológica de 2000? Porque la única cosa peor que un mercado con altas valoraciones es un mercado sin valoraciones y sin liquidez. Si las acciones de una empresa valen lo que alguien va a pagar por ella, ¿cuál es el valor de una empresa cuando no se puede vender?
En esencia, Cuban cree que a pesar de las enormes inversiones que están recibiendo muchas start-ups, no hay ningún dinero real en esas empresas. Con el tiempo, eso se pondrá de manifiesto, pero los inversores se quedarán atrapados.
Sin embargo, muchos creen que estamos a salvo, ya que los inversores son más precavidos ahora. En respuesta a Cuban, el empresario Amish Shah escribió en Business Insider que los inversores actuales no están buscando el tipo de retorno rápido que se buscaba en 2000. En cambio, saben que la inversión privada es un proceso de largo plazo, donde se tardarán años en obtener beneficios. Además, añade, los inversores actuales son tan precavidos por lo que pasó hace 15 años que miran con lupa sus inversiones. En otras palabras, si el mundo ha aprendido algo o no sobre la burbuja del 2000, hay algo que no se olvidará: fue terrible, y nadie quiere que suceda de nuevo.”

Fuentes: Ben Geier, The Time

miércoles, 18 de marzo de 2015

Los tipos de interés negativos en Europa están poniendo a prueba los sistemas informáticos de bancos

El comportamiento del mercado asociado a las fechas de vencimiento de derivados, maquillaje acentuado y aumento de volatilidad, acecha a los mercados financieros esta semana de vencimiento del primer trimestre del año. El viernes el mercado USA cerró en ligero tono negativo, S&P500 -0.61%, aunque consiguió un tímido rebote al final de la sesión, cuando el índice se encontraba al borde de la ruptura de una referencia técnica relevante para el corto plazo. En plazos mayores, el índice permanece cotizando dentro del rango 1.985 – 2.120, los 6 últimos meses, y a media que avanza el tiempo el índice avanza estrechando la amplitud de sus movimientos y de acuerdo con los designios que marcan las directrices de tendencia -trazos marrones- de medio plazo. En las últimas sesiones, además, se observa la resistencia normal del índice a penetrar bajo su media móvil de 50 sesiones.

S&P500 diario

SP500 diario






CONTIENDA CONTRA EL FANTASMA DEFLACIONISTA.
La batalla abierta de las autoridades globales para evitar una espiral deflacionista severa se centra básicamente en dos pilares; fabricar dinero y manipular los tipos de interés de todo el espectro de la curva de tipos, aplicadas ambas en intensidad histórica.  
En 2007 comenzaron a surgir los grandes problemas derivados del la extensión del super ciclo de crédito comenzado en los años `80 y la dependencia económica del crédito, se amontonaron las deudas y los excesos de capacidad que tienden a anticipar procesos de desinflación  y/0 deflación.
Entonces, los Bancos Centrales comenzaron la gran batalla anti deflacionista que aún libran, una de cuyas derivadas es la actual guerra de divisas.
Paradójicamente, la realidad de los excesos generados por el largo ciclo de deuda no se ha intentado solucionar, más bien al contrario. Aún a sabiendas del lastre para el crecimiento económico que supone amontonar deudas, el super ciclo de deuda continúa.
En 2007, la deuda global era de $142 BILLONES y a finales de 2014 alcanzó los $199 BILLONES, +40%, con los artífices globales esperando aún solucionar un problema de deuda con más deuda.
Esta quijotesca tesitura está requiriendo emplear esfuerzos sin precedentes, crear cantidades de dinero sin precedentes (para acumularlo en los balances de Bancos, Instituciones y Bancos Centrales convertido en una figurada tarjeta de crédito para los Tesoros) distorsionar los mercados como nunca antes y situar los tipos de interés en terreno negativo.
La economía global se mueve en terreno inexplorado, los Bancos Centrales creen estar tomando las decisiones correctas, aunque son improvisadas y moduladas, data dependientes y reforzadas a medida que pasa el tiempo y observan su insuficiente eficacia y tasa de retorno decreciente.
Las consecuencias son también imprevisibles.
21 Bancos Centrales han rebajado tipos en 2015 y 10 Bancos han situado la tasa en terreno negativo.
Nunca antes en la historia se había dado la circunstancia de que 10 Bancos Centrales tuvieran tipos de interés negativos, como ahora.
Por el contrario, las autoridades en Estados Unidos finalizaron su QE en octubre y se encuentran ante una encrucijada, normalización de la política, enormemente compleja.
Una consecuencia y efecto no deseado del cambio hacia la normalización de política monetaria de la FED se manifiesta en la fortaleza de su moneda y consecuente deterioro en las cuentas de las multinacionales USA.    
La robustez del Dólar es considerable, inmerso en un proceso retroalimentado, ha subido alrededor del 25% en pocos meses y ahora los grandes expertos proyectan precios aún más fuertes para el próximo futuro, vean las estimaciones de Euro-Dólar en 0.80 de Goldman Sachs.
Nuestras estimaciones vienen de atrás, comenzando con la estrategia de abrir largos de Dólar contra Euro en la zona 1.40 el pasado 15 de mayo,  RISK ON – RISK OFF. DIVISAS. NUEVA ESTRATEGIA +25% o el pasado 13 de octubre con el cruce en 1.28 apuntando a niveles alrededor de la paridad EUROGLUT: ¿EURO-DOLAR =>0.95?.
Hoy el Euro Dólar ha alcanzado nuestra zona objetivo más probable, o caja negra del gráfico, y esperamos un  (reservado en atención a lectores de pago).

EURO-DÓLAR semana

EURO DÓLAR mensual




Penalizar al ahorro y fomentar el endeudamiento gratuito tampoco se había producido antes de forma tan masiva. Las consecuencias de tergiversar así el fundamento base de la economía son aún desconocidas.
Curiosamente surgen imprevistos. Tipos de interés negativos en Europa están poniendo a prueba los sistemas informáticos de la banca, de acuerdo con informaciones de The Wal Street Journal.  El posible riesgo es asimilable al efecto cambio de siglo denominado Y2K… riesgo que, por cierto, nunca se manifestó:
“Widespread negative interest rates, once only a theoretical possibility, have become a real-life problem for Europe’s financial system.
From Sweden to Spain, banks, brokers and other financial firms are grappling with technical and legal glitches thrown up by negative rates, forcing them to redesign computer systems, tear up spreadsheets and redraft legal contracts.
The issue echoes the scrambles around the Year 2000 computer bug and the launch of the euro, when some bank systems couldn’t handle the introduction of a new currency, said Kevin Burrowes, head of U.K. financial services at PricewaterhouseCoopers.
A handful of malfunctioning computer programs can cause “huge problems,” while working around problems manually makes necessary more controls and increases the risk that something could go wrong, Mr. Burrowes said.
Central banks across Europe have driven interest rates below zero in an effort to stimulate growth. But financial markets were built around the principle that creditors are paid to lend cash, not the idea that debtors are paid to borrow it.”
Los mercados de acciones presentan un comportamiento acorde con nuestra sugerencia estructural del año a través del “Pair Trading” Largos Europa y Cortos USA.   
Las recomendaciones de mercado más recientes son orientadas a aprovechar el impacto del nuevo QE europeo, analizando en detalle una paradoja verdaderamente sorprendente… (reservado suscriptores). 

Información en cefauno@gmail.com
 Twitter: @airuzubieta

Las guerras de divisas… no están funcionando

Aunque ninguno de los bancos centrales admitirá que sus políticas están diseñadas para debilitar su moneda y aumentar la competitividad para tener un nuevo y brillante futuro de crecimiento para su nación (mediante la impresión de dinero), está claro que es el ruta que se ha elegido.
Sin embargo, como muestran los siguientes gráficos, esto no ha funcionado.
Devaluación masiva en Japón... expectativas de crecimiento económico desacelerándose (ver primer gráfico).
Devaluación masiva en Europa... expectativas de crecimiento económico desacelerándose
Devaluación masiva en Europa... expectativas de crecimiento económico desacelerándose


Y luego está Estados Unidos ...

Es evidente que la respuesta a Japón y de Europa problema es más devaluación...

 
Fuentes: Zerohedge