Una larga expansión es un argumento convincente para comprar acciones a pesar de que el PER fuera históricamente alto. Los inversores tienden a estar dispuestos a pagar más por las acciones si perciben que la expansión económica podría durar algunos años más. Cuanto más tiempo tengamos hasta la próxima recesión, más tiempo habrá para que crezcan las ganancias y justifiquen las valoraciones. La exposición anterior fue realizada recientemente por el prestigioso analista y gestor Ed Yardeni.
Yardeni añadió que si una recesión es inminente, las acciones obviamente deben ser vendidas de forma inmediata, especialmente si tienen un PER alto desde el punto de vista históricos. Los mercados alcistas no mueren de viejos, son asesinados por las recesiones.
Yardeni analiza el índice de indicadores coincidentes (CEI) para tener una orientación histórica sobre la longevidad de las expansiones económicas. Los resultados son los siguientes:
- El CEI tardó 68 meses, desde enero de 2008 hasta octubre de 2013, en recuperarse de la severa caída anterior durante 2008 y principios de 2009. Los cinco períodos de recuperación anteriores promediaron 26 meses, en un rango de 19 a 33 meses.
- El incremento medio del CEI tras cada uno de esos períodos de recuperación fue del 18,6%. Si aplicamos ese promedio al ciclo actual, el CEI alcanzaría su máximo en 48 meses más en marzo de 2019. Una ganancia sustancial desde los actuales niveles.
- Los cuatro componentes del CEI (nóminas laborales, ingreso personal real menos los pagos de transferencia, producción industrial y ventas comerciales), están en niveles récord.
Cuáles son las conclusiones de Yardeni:
- Las acciones no están baratas.
- Hay buenas razones para comprar de todos modos.
- La expansión podría durar hasta marzo de 2019.
- Las valoraciones están dentro de los promedios históricos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario