¿Y pueden imaginarse como va a evolucionar el tema de las pensiones?.
Pienso que ha empezado ya un proceso que será enrevesado, hasta caótico; con marchas adelante y atrás, con endurecimientos de posturas primero y ablandamientos de posiciones después pero sin deshacer nunca del todo lo decidido; de manifestaciones, de represión de tales manifestaciones; de llamadas a la justicia social y la austeridad. Todo ello para llegar, en un plazo de diez o quince años a una caída de, atención ahora, la masa total de dinero dedicado al pago de pensiones; como se reparta esa cantidad será otra cosa.
De entrada una realidad ya no negada por nadie: mientras los ingresos de la Seguridad Social están estancados los gastos no cesan de crecer, y todo apunta que así va a seguir; luego esto está ya siendo ‘la crónica de una muerte anunciada’.
Existe un agravante: la situación es alarmante porque los gastos muestran una tendencia de crecimiento meteórica; luego, al margen de que se reduzcan, la velocidad de disminución será menor que el crecimiento natural de dichos gastos, por lo que es necesario incrementar dicha velocidad. Como saben la Seguridad Social básicamente se ocupa de dos cosas: del pago de las prestaciones por desempleo y del pago de las pensiones.
Con las prestaciones por desempleo pienso que poco se puede hacer -y poco van a hacer- para reorganizarlo porque el desempleo va a continuar aumentando, por lo que lo único previsible es que, pura y simplemente sean reducidas. Las pensiones son otra cosa.
Pienso que las pensiones de jubilación van pasar por un proceso reorganización en cuyo final la masa total de las pensiones puede verse reducida en un porcentaje superior al 40%. El proceso podría ser algo así:
En un primer momento, el próximo año, posiblemente, los importes de las pensiones pueden ser congelados, de entrada por un número de años concretos, para, luego, ampliar el período. Paralelamente podría alargarse la vida laboral efectiva a una edad concreta hasta que, con el tiempo sea eliminado el período máximo legal de trabajo, lo que forzará a muchas personas a seguir en activo (caso de poder) debido a que su pensión no les permita la subsistencia..
En unos meses puede decretarse todo el período de vida laboral como cómputo para el cálculo de la pensión para, unos mese después, introducir un coeficiente que considere la variación del PIB en el cálculo de la variación del presupuesto de las pensiones. Pienso que no es previsible que las pensiones sean compensadas con arreglo a la esperanza de vida ya que la esperanza de vida tiende a disminuir a medida que el gasto en protección social vaya disminuyendo.
Bajo nuestros parámetro no tienen demasiadas buenas perspectivas las pensiones, y de eso los jóvenes saben mucho: mis alumnos tienen muy claro que no van a percibir una pensión al menos tal y como una pensión hoy se entiende.
Antes de 1933 no existían pensiones (entérense como iba lo que Von Bismark puso en marcha), y desde entonces no han dejado de evolucionar. ¿Por qué no pueden dejar de ser existir o pasar a ser otra cosa?.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.
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