sábado, 17 de diciembre de 2016

Ni una palabra

No, pienso que no es que las gentes del FMI sean unos ‘cochinos capitalistas’ como algunos les califican, es que lo-que-no-es-eso no importa.
Ni una sola palabra a la creciente tasa de pobreza; ni al ascendente número de personas en riesgo de exclusión social; ni al subempleo; ni a los salarios medios que en términos reales llevan años decreciendo; ni al colapso anunciado en el sistema de pensiones; ni a una competitividad basada en la reducción de costes laborales; ni a que la sociedad española se está escindiendo en dos: la parte que cree-que-ahora-si-porque-necesita-creerlo-y-de-momento-no-le-han-echado-del-trabajo y la que ya-ha-quedado-en-la-cuneta-y-ahí-se-va-a-quedar-porque-no-es-necesaria. De todo eso y de cosas parecidas, ni pío; pero no por cuestiones ideológicas o para oprimir a ‘las clases populares’, sino porque ningún otro planteamiento tiene cabida en sus esquemas de trabajo.


Lo anterior puedo entenderlo porque es ‘su forma de hacer’, lo que no comprendo es que una institución como el FMI diga que la recuperación de la economía española es impresionante teniendo en cuanta como se ha producido, y en base a qué se ha producido tal aumento.
España tiene una productividad por hora efectivamente trabajada muy baja, un nivel de fraude fiscal enorme, una tasa de economía sumergida de país subdesarrollado, una estructura de PIB dependiente. El FMI dice lo que dice porque es imprescindible que la confianza en España no empeore a fin de que no se encarezca la deuda de España y España deba pagar más de los 30 mM€ de intereses de su deuda que ya paga y para que esa ciudadanía española que está en la cuneta no se asuste ante el panorama que España tiene ante sí y no salga a la calle diciendo que ya está harta de lo que sucede. Y por eso, por ejemplo, el FMI recomienda que hay que contratar gente en las condiciones que sea a fin de que el paro descienda y a los parados no les de por pensar en cosas inconvenientes. (Y por eso cada vez se habla con más normalidad y más habitualmente de la renta básica o equivalentes)
Pero el FMI acierta en una cosa: el problema de España es de ingresos mucho más que de gastos, lo que sucede es que para que esos ingresos aumenten los gastos bajarán porque la renta personal disponible es la que es … y nada apunta que vaya a aumentar para una gran mayoría.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

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