El mercado ha entrado en animación suspendida tras el débil rebote tras la oleada de ventas de finales de agosto. La volatilidad en los mercados de China se ha estabilizado más o menos mientras Beijing trata de contener las caídas de las acciones. Ahora, toda la atención se ha centrado en lo que va a hacer la Reserva Federal el 17 de septiembre
En este punto, lo más probable es que la Fed no haga nada, manteniendo una política de tasas de interés de cerca del cero por ciento que ha estado en vigor desde 2008. Las acciones deberían celebrar la confirmación de una Fed pesimista que, cuando hay señales mixtas, prefiere mantener el flujo de dinero barato.
En este punto, lo más probable es que la Fed no haga nada, manteniendo una política de tasas de interés de cerca del cero por ciento que ha estado en vigor desde 2008. Las acciones deberían celebrar la confirmación de una Fed pesimista que, cuando hay señales mixtas, prefiere mantener el flujo de dinero barato.
Pero el riesgo de una sorpresa alcista y una subida de tasas inesperada no se puede descartar por completo (el mercado de futuros sitúa las probabilidades de que esto suceda en tan sólo el 28 por ciento), y eso sin duda provocaría un desplome de las acciones. "No es de extrañar que el volumen de operaciones se esté secando y la actividad sea muy ligera", dice Anthony Mirhaydari en The Fiscal Times.
"En términos históricos, retrasar el comienzo de una normalización de la política monetaria conlleva riesgos de burbujas financieras, malas inversiones y la creación de un exceso de confianza entre los inversores: Al salir de la recesión de 1990-1991, el inicio de las subidas de tipos comenzaron con una tasa de paro en el 6,6 por ciento. Al salir de la recesión de 2001, las alzas en las tasas comenzaron con la tasa de paro en el 5,6 por ciento.
De hecho, la presidenta de la Fed de Cleveland Loretta Mester dijo recientemente que la economía estaba "en o cerca del pleno empleo" - admitiendo que uno de los objetivos de la política de la Fed se había cumplido.
Los funcionarios de la Fed más moderados están preocupados por la reciente turbulencia de los mercados, la persistente baja inflación, el lastre de un dólar fuerte y potenciales efectos deflacionistas por la desaceleración económica en China y otras economías emergentes.
Dado que Yellen se escudado en los datos para no subir tipos, esto será cada vez más difícil de justificar si observamos los datos de empleo.
Una posible estrategia para Yellen será centrarse en la desaceleración de la tasa de contrataciones, que cayó al 3,5 por ciento desde el 3,7 por ciento de junio y se mantiene muy por debajo del máximo previo del 4,4 por ciento establecido en enero de 2001. La tasa de ofertas de trabajo ahora está por debajo de la tasa de contrataciones, algo que no había sucedido antes. Esto es un indicativo de las fricciones estructurales en el mercado laboral."
Por su parte, el economista de Deutsche Bank Joseph LaVorgna dijo a sus clientes que hay siete razones por las que la Fed no va a subir las tasas este mes:
1. Las bolsas mundiales están frágiles.
2. El dólar ha estado fuerte, con un peso en el crecimiento del PIB a través del comercio.
3. Los mercados financieros siguen asignando una baja probabilidad de un alza de tasas septiembre según el comercio de futuros (como se señaló anteriormente, las probabilidades se sitúan en el 28 por ciento vs. 54 por ciento en el mes pasado).
4. Varios funcionarios clave de la Fed parecen estar sutilmente alejándose de la idea de subir tipos en septiembre con palabras como "menos convincentes" y "factores de complicación" y "significativos vientos en contra...".
5. Hay reuniones en octubre y diciembre por lo que la Fed todavía puede subir tipos este año si los mercados se estabilizan.
6. La Fed no teme una pérdida de credibilidad si no sube tipos.
7. Y la inflación sigue siendo baja, con la medida preferida de la Fed subiendo apenas un 1,2 por ciento en los últimos 12 meses.
"En términos históricos, retrasar el comienzo de una normalización de la política monetaria conlleva riesgos de burbujas financieras, malas inversiones y la creación de un exceso de confianza entre los inversores: Al salir de la recesión de 1990-1991, el inicio de las subidas de tipos comenzaron con una tasa de paro en el 6,6 por ciento. Al salir de la recesión de 2001, las alzas en las tasas comenzaron con la tasa de paro en el 5,6 por ciento.
De hecho, la presidenta de la Fed de Cleveland Loretta Mester dijo recientemente que la economía estaba "en o cerca del pleno empleo" - admitiendo que uno de los objetivos de la política de la Fed se había cumplido.
Los funcionarios de la Fed más moderados están preocupados por la reciente turbulencia de los mercados, la persistente baja inflación, el lastre de un dólar fuerte y potenciales efectos deflacionistas por la desaceleración económica en China y otras economías emergentes.
Dado que Yellen se escudado en los datos para no subir tipos, esto será cada vez más difícil de justificar si observamos los datos de empleo.
Una posible estrategia para Yellen será centrarse en la desaceleración de la tasa de contrataciones, que cayó al 3,5 por ciento desde el 3,7 por ciento de junio y se mantiene muy por debajo del máximo previo del 4,4 por ciento establecido en enero de 2001. La tasa de ofertas de trabajo ahora está por debajo de la tasa de contrataciones, algo que no había sucedido antes. Esto es un indicativo de las fricciones estructurales en el mercado laboral."
Por su parte, el economista de Deutsche Bank Joseph LaVorgna dijo a sus clientes que hay siete razones por las que la Fed no va a subir las tasas este mes:
1. Las bolsas mundiales están frágiles.
2. El dólar ha estado fuerte, con un peso en el crecimiento del PIB a través del comercio.
3. Los mercados financieros siguen asignando una baja probabilidad de un alza de tasas septiembre según el comercio de futuros (como se señaló anteriormente, las probabilidades se sitúan en el 28 por ciento vs. 54 por ciento en el mes pasado).
4. Varios funcionarios clave de la Fed parecen estar sutilmente alejándose de la idea de subir tipos en septiembre con palabras como "menos convincentes" y "factores de complicación" y "significativos vientos en contra...".
5. Hay reuniones en octubre y diciembre por lo que la Fed todavía puede subir tipos este año si los mercados se estabilizan.
6. La Fed no teme una pérdida de credibilidad si no sube tipos.
7. Y la inflación sigue siendo baja, con la medida preferida de la Fed subiendo apenas un 1,2 por ciento en los últimos 12 meses.
Fuentes: Deutsche Bank, Anthony Mirhaydari
No hay comentarios:
Publicar un comentario