jueves, 25 de julio de 2013

Deuda y Consumo

Deuda: el Martes recibí un mail de un lector:
“Buenos días, leyendo su interesante artículo de hoy en "La Carta de la Bolsa"(http://lacartadelabolsa.com/leer/articulo/deuda_1), me asalta una duda. Cuando se hagan las "quitas" (que se harán, y que usted lleva años anunciando), cómo se harán? Quién se "beneficiará" de esas quitas: los estados (Deuda pública, bonos, etc.), empresas (préstamos y créditos que no pueden pagar), familias (hipotecas)? Cree usted que se efectuará una quita a los particulares con hipotecas que no pueden pagar? me cuesta pensarlo... no creo que a las personas físicas nos perdonen una parte de nuestra deuda, ojalá, pero...
Por cierto, hace meses le envié un e-mail en el que le comentaba que para solucionar el tema de los paraísos fiscales (y otros temas más) iría muy bien eliminar el dinero físico y operar sólo con dinero de "plástico" (tarjetas), y veo que el otro día ya escribió algo en ese sentido. Creo que sería lo mejor pues aunque sea muy difícil de aplicar (globalmente) se minimizarían muchos problemas y los impuestos aumentarían enormemente al quedar "registradas" muchas operaciones que al hacerse ahora en efectivo quedan en el limbo”.
Mi respuesta fue:
“Existe otra opción a las quitas y es 'olvidarnos' de una parte de la deuda (el meter la deuda en un armario y tirar la llave): se conserva en los balances nacionales y de los tenedores pero sólo a fin de cuadres. Puede aplicarse una combinación de ambas. Sí, pienso que habrá quitas generalizadas, pero en términos sociales resolverán poco: si una familia debe 10.000 y tiene unos ingresos de 100 cuando las necesidades básicas son de 100, es cierto que si la quita es de 10.000 deja de deber, pero sus expectativas incluso irán a menos porque la contrapartida de esa quita será capacidad de generación de PIB. Imagine esto aplicado a una empresa.
La eliminación del papel moneda y su sustitución por medios electrónicos de pago ha de venir acompañada de una reforma fiscal integral en la que los tipos impositivos se redujesen en la medida en que el fraude fiscal pasaría a ser cero. La estructura impositiva de ese sistema fiscal sería otro asunto”
***
Consumo: “Los recortes se comen el bolsillo familiar”. (http://economia.elpais.com/economia/2013/07/22/actualidad/1374521109_259268.html) El País 23.07.2013, Pág. 21. (Los gráficos que acompañan al texto no tienen desperdicio).
La verdad que nadie dice: España está caminando inexorablemente hacia una estructura de gasto de economía escasamente desarrollada o nada desarrolla
Lo que marca la diferencia en una senda de desarrollo es el consumo -interno o externo- de servicios. Una vez cubiertas las necesidades básicas y las esenciales, la ciudadanía quiere más, y ese más son servicios, primero de menos valor, y, después, de mayor valor junto a bienes de lujo relativo. (Ese ha sido el motivo por el que el Sector Servicios ha tenido un pero creciente en el PIB de los países desarroolados en estos pasados años).
Entre el 2008 y el 2012 el consumo de bares y cafeterías en España aumentó el -247,8%, el de restaurantes el -214,8%, y el de vacaciones todo incluido el -115,4%. En ello fue determinante que el gasto medio por hogar pasase de 32.000 € en el 2007 a 28.151 en el 2012. ¿Aumentó algún gasto? Se preguntarán, si: en electricidad: el que más: el 254,6%.
Disminuyen los ingresos porque aumenta el desempleo y se reducen los salarios, pero aumentan los costes de los servicios básicos y suben los impuestos. La renta disponible cae y la capacidad de endeudamiento está por los suelos. Un cocktail mortífero. Menos mal que las exportaciones y el turismo van a salvar a la economía española.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

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