Ante la toma de control del Estado en Bankia y el desplome de sus
acciones, una pregunta flota en el aire ¿fue un acierto sacar a bolsa a
Bankia?
Anunciado como "el líder de los nuevos bancos" en su propia publicidad,
Bankia logró el año pasado algo que casi ninguna otra compañía en
Europa pudo - vender acciones en una oferta pública inicial, aumentando
su capital en 3.300 millones de euros en medio de una crisis de deuda
gigante.
Esta hazaña fue considerada como una prueba del éxito de las reformas bancarias del gobierno español de entonces.
Sin embargo, después de haber sido "colocada" principalmente a los
ahorradores españoles, la salida de Bankia no ha salido como todos
querían.
Cualquiera que haya comprado en la oferta, que se vendió en gran parte a
los propios clientes del banco como una inversión sólida, ha perdido
más del 40 por ciento de su valor en menos de un año.
"Los institucionales extranjeros no tocaron Bankia en su colocación",
dijo un inversor institucional británico al que propusieron entraron en
la entidad en la oferta de venta. "Había demasiadas banderas rojas".
Alrededor del 60 por ciento de la emisión de acciones fue vendida a los
inversores minoristas, y el grueso de la cantidad restante se colocó a
empresas españolas, como Mapfre, la aseguradora que tiene un 15 por
ciento de Bankia.
Miles Johnson señalan en un artículo en Financial Times que ahora, con
la dimisión de Rodrigo Rato - el ex Director General de Fondo Monetario
Internacional que se convirtió en presidente de Bankia - antes de la
intervención del Gobierno, la mayor parte de los analistas, banqueros y
empresarios en España reconocen que la salida a bolsa de Bankia ha sido
un fracaso.
"Algunas de las fusiones que tuvieron lugar entre cajas fueron
disfuncionales", dijo Santiago Carbó, profesor de economía en la
Universidad de Granada. "Una de las razones fueron los continuos lazos
políticos con las cajas, pero el gobierno también fue demasiado
optimista - ya que pensó que la crisis habría terminado por ahora, pero
las crisis bancarias tardan mucho tiempo en resolverse."
Desde que Bankia comenzó a cotizar en bolsa, se ha puesto en duda el
valor de los activos de los diversos grupos de Bankia, que se forjó a
partir de una fusión de siete cajas de ahorro, dice Johnson.
El Banco de Valencia, una filial de Bankia, fue adquirida por el Banco
de España el pasado mes de noviembre, provocando una guerra civil dentro
de Bankia respecto a que miembro de la unión había sobrevalorado sus
activos inmobiliarios en el momento de la fusión.
Deloitte, auditor de la entidad durante el tiempo de la salida a Bolsa,
se negó a firmar las cuentas de BFA, la matriz de Bankia que alberga
los peores activos de la entidad combinada y que poseía el 45 por ciento
de Bankia.
Deloitte se negó a comentar las cuentas de BFA, que había informado de
pérdidas de 278 millones de euros en el segundo semestre.
La inquietud acerca de las cuentas aumentó después de que Bankia
revelara que había renegociado 9.900 millones de euros de activos en
2011, para evitar que entraran en la calificación de "malos" - una
práctica que es aceptada por los reguladores, pero que se ve como una
posible forma que tienen los bancos para subestimar sus préstamos en
mora.
Ahora, con la salida de Rato, y la llegada de José Ignacio
Goirigolzarri, ex consejero delegado de BBVA y uno de los banqueros más
respetados de España, el Gobierno español espera que se limpie esta
exposición.
Goirigolzarri fue personalmente aprobado por los máximos responsables
del Santander, La Caixa y BBVA el viernes, según dijeron personas con
conocimiento de la situación, y se espera que reduzca gran parte de los
gestores heredados de las cajas que formaron Bankia.
No será una tarea pequeña.
Iñigo Vega, analista de CA Cheuvreux, señala que BFA posee 51.500
millones de euros de activos inmobiliarios, o el 17 por ciento del total
de todo el sistema bancario español.
Después de la decepción bursátil, con el consiguiente dolor que ha
causado a los pequeños inversores, la llegada de Goirigolzarri da alguna
esperanza de éxito al banco que tiene un 10 por ciento de cuota de
mercado en España.
"Lo que estamos viendo es un cambio de ritmo en la reforma de la banca,
y eso es positivo", dijo Juan Carlos Ureta, presidente de Renta 4.
"Puede que sea tarde, pero es positivo".
Fuentes: Miles Johnson – Financial Times
lacartadelabolsa
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