Las entidades financieras españolas tienen poco más de 400 millones de euros en títulos de deuda soberana griega, mientras que la exposición total de la Banca alemana ronda los 30.000 millones - unos 22.000 millones en deuda pública -, y la francesa supera los 55.000 millones -14.960 millones en deuda pública.
El temido y, en opinión de no pocos analistas cada vez más inevitable, ‘default’ de Grecia podría implicar quebrantos de hasta el 80 por ciento del valor de la inversión de los titulares de bonos públicos. En este contexto, con la economía mundial en las puertas de una nueva recesión y la desconfianza extendida sobre Portugal, Italia y España, el temor al efecto dominó cobra una vital importancia.
La cartera de deuda pública portuguesa en manos de bancos españoles es también relativamente escasa (exposición de 5.492 millones), aunque las estrechas relaciones económicas entre los vecinos peninsulares y los 61.999 millones en Créditos de la Banca española a empresas y particulares lusos magnificarían el efecto.
“Es mucho más (problema) Portugal, aunque solo sea por el tráfico entre empresas”, dijo una fuente del Sector Bancario.
Pero, al margen de estadísticas de probabilidad, la preocupación mayor en estos momentos es la hipótesis de que la deuda pública española pueda verse arrastrada por la vorágine más o menos irracional.
Con un saldo vivo bruto en deuda pública a finales de junio de casi 566.000 millones de euros, el Tesoro español sustenta gran parte de la financiación del déficit del Estado sobre las espaldas de los bancos.
Las entidades españolas agrupan títulos de deuda pública nacional por valor de 232.000 millones euros, según datos facilitados en las pruebas de estrés realizadas en Europa el pasado mes de julio.
“Los bancos españoles se verían perjudicados por (...) la posibilidad de que pudiera producirse una situación similar sobre la deuda española. En ese caso, los principales perdedores serían los bancos españoles, con las grandes entidades a la cabeza”, explicó un operador bursátil.
El deterioro de la marca España - reflejado en el abrupto descenso bursátil desde primeros de agosto y una deuda pública ficticiamente sostenida por intervenciones del Banco Central Europeo - ha perjudicado particularmente a los bancos, pese a que en muchos casos no está justificado por sus fundamentales.
“Una subida de los spreads implica de inmediato un encarecimiento de la financiación de las entidades y un recorte de márgenes”, explicó un analista.
En términos de valoración por proyección de beneficios (PER), rentabilidad por dividendo o precio alcanzado por la acción, no pocos expertos aseguran que los fundamentales no justifican descensos de precio del 25 por ciento en los dos grandes bancos españoles, Santander y BBVA.
Con niveles de capitalización entre los más altos de Europa, elevados ratios de depósitos frente a Créditos, tanto Santander como BBVA fueron destacados por Standard and Poor’s a principios de septiembre entre los bancos más solventes de Europa.
Santander tiene un ratio de Créditos a la clientela sobre recursos de clientes gestionados del 72 por ciento, mientras que en BBVA el porcentaje es de más del 90 por ciento, según datos del primer semestre de este año.
Pese a que ambas entidades han sufrido en sus carteras inmobiliarias la profunda crisis del sector de vivienda en España, al igual que el resto de la Banca nacional, cuentan a su favor con el elemento diferenciador de una fuerte diversificación geográfica internacional.
Según datos de Thomson One, el precio objetivo de las casas de análisis sobre BBVA y Santander otorga a ambos valores un recorrido alcista teórico de en torno al 50 por ciento sobre los precios actuales.
—Para ver un gráfico sobre BBVA y Santander en bolsa pinchar en http://r.reuters.com/xem73s
DIFÍCIL ACCESO A FINANCIACIÓN
El acceso de los bancos españoles a los estrechos mercados interbancarios para su financiación diaria se ha visto complicado en este contexto de deterioro de imagen, mayor percepción de riesgo y diferenciales de deuda en zona próxima a los máximos desde la constitución del euro.
“No es que esté cerrado (el mercado interbancario), está cerradísimo desde agosto para todas las entidades bancarias europeas medianas o pequeñas, y si es un banco español, más complicado todavía”, dijo la fuente del Sector Bancario.
La apelación al mercado mayorista a través de emisiones de renta fija también se ha reducido ostensiblemente por similares motivos, con la excepción parcial de las cédulas hipotecarias.
“Tampoco hay ventanas de oportunidad para emisiones mayoristas (de deuda), por lo que se está recurriendo una vez más a subastas del BCE y a depósitos de clientes”, añadió la fuente.
La apelación de los bancos españoles a la institución monetaria europea en agosto alcanzó 81.607 millones de euros, un 42 por ciento más respecto al mes anterior.
Analistas destacan que el recurso al BCE ha sido más frecuente en las cajas de ahorro, parte de las cuales se encuentra aún inmersa en procesos de recapitalización para despejar las dudas de los mercados sobre su solvencia.
Las adversas condiciones de los mercados obligarán a algunas a suspender sus planes de salida a bolsa, condenadas a una intervención estatal en su capital, según expertos.
http://lacartadelabolsa.com/leer/articulo/GRECIA_un_pequeno_problema_para_la_banca_espanola_pero_un_gran_contagio
No hay comentarios:
Publicar un comentario