Si Telefónica (Timofónica, como dicen muchos) sigue adelante con su planteamiento de cobrar por los contenidos en vez de por la velocidad, limitando así muchos de los servicios que se ofrecen a día de hoy por internet, puede pasar a la historia como la empresa que destruyó internet y el futuro de las nuevas tecnologías.
Todos conocemos ya, en mayor o menor medida, la nueva política que Telefónica pretende sacar adelante respecto de sus tarifas de ADSL. Considera que los gastos que le supone mantener la infraestructura y el tráfico de internet no es sostenible, y plantea cambiar su modelo de negocio, apostando por cobrar por los contenidos que los usuarios se descarguen (y estableciendo límites) en vez de apostar por la velocidad ofrecida. A esto lo llama política de uso razonable.
En el Reino Unido, ya ha comenzado a hacer realidad esta política, estableciendo, de forma unilateral, nuevas tarifas y limitando la descarga de contenidos a 20 MB. Si por alguna casualidad, nos pasamos de esta cantidad, primero nos advertirán y después nos cortarán la línea, aunque por supuesto tendremos que seguir pagando la cuota, porque según ellos, habremos incumplido las condiciones establecidas unilateralmente por ellos.
Sinceramente, esto es un atropello. Primero porque es falso que se encuentren en un cuello de botella en cuanto a sus ingresos y al tráfico que reciben, donde según muchos estudios, muy pocos usuarios son los que tienen un tráfico muy alto, mientras que la mayoría no llega a usar prácticamente nada del servicio ofrecido por la teleoperadora. Se me ocurre en este punto, preguntar, tanto a los proveedores de internet como a los órganos que los rigen, cómo se puede consentir que estas empresas estén ofreciendo 3Mb, 6Mb, 20Mb…. y cobrando por ello a los usuarios, cuando está demostrado que jamás han llegado a esos niveles de velocidad. Vayamos a alguna localidad cercana a una gran ciudad, y comprobemos si pasamos de 1Gb; en la mayoría de los casos no, pero eso sí, nos cobran por el servicio con la mayor impunidad.
El futuro de internet y las nuevas tecnologías está en un gran peligro si finalmente Telefónica y otras teleoperadoras, implantan esta nueva forma de uso y utilización de internet. En peligro porque son muchos los modelos de negocio que pueden acabarse aun cuando su éxito y desarrollo en este momento se encuentran en su momento álgido. Por poner algunos ejemplos:
- Streaming: portales como Youtube y otros donde ver legalmente películas o escuchar música pueden tener sus días contados.
- P2P: por supuesto, los programas, servidores y plataformas para P2P estarán totalmente vetados, ya permitan descargar contenido legal o ilegal. En este punto, me surge la duda de cómo pueden conseguir identificar si estás descargando archivos P2P o de otro tipo. ¿Acaso miran el contenido, privado, de nuestras descargas?….. Puestos a esto, porqué no miran nuestro correo postal y su contenido, por si acaso recibimos algo que pueda no interesarles…
- Videojuegos. La industria de los videojuegos puede ser una de las más perjudicadas. Prácticamente todas las grandes empresas desarrolladoras, ya permiten la actualización (y por supuesto compra) de los diferentes títulos a través de internet y para cualquier plataforma: PS, PS, XBOX, etc. Y ya no hablemos de las partidas multijugador, tan de moda hoy en día, no solo en los servidores de internet…. ¿qué pasara cuando varios amigos hagan una partida privada, y uno de ellos tenga que hacer de servidor?….
- TV: Muchos dicen que el futuro de la televisión está en internet, en la TV a la carta por internet. Si cobran por los contenidos, ¿cuánto habrá que pagar para ver la tele dentro de unos años?
- Software: actualizar Windows, alguno de sus parches o adquirir un Service Pack para actualizar tu SO, así como descargar software, tanto gratuito como de pago, legal o ilegal, puede tener sus días contados.
Estos son tan solo algunos ejemplos de lo que puede suceder si el modelo de telefónica se impone finalmente. Todavía no está claro si el resto de operadoras sigue el criterio de Telefónica, pero todo puede suceder. Que yo sepa, en estos momentos tan solo Jazztel ha hecho un comunicado en firme, afirmando que no compartirá esta política. El resto de los operadores está por ver. Yo, personalmente lo tengo muy claro, si mi operador implanta esta nueva forma de uso, me quitaré internet y me prepararé para volver a la edad de piedra.
Es una política muy arriesgada la que está tomando Telefónica, tanto si le sale bien como si le sale mal, esperemos que al final se imponga la cordura. De momento, ya se han creado numerosos grupos de en contra de esta política de uso razonable, que atenta de forma frontal con la política de neutralidad en la red.
fuente: http://www.eleconomista.es/vivienda/noticias/2446499/09/10/El-precio-de-la-vivienda-sube-en-el-segundo-trimestre-por-primera-vez-en-dos-anos.html
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