domingo, 3 de julio de 2016

¿Por qué el Brexit afecta incluso a los bancos que no tienen negocio en Reino Unido?

Los bancos españoles, y también del resto de Europa, están sufriendo en Bolsa el torbellino del brexit. En el caso de los españoles han perdido más de 23.000 millones de euros de su capitalización bursátil, pero ¿por qué este castigo de los inversores? Los expertos señalan dos puntos como claves: por un lado, su exposición a la libra que supondría un impacto en el beneficio; por otro, que los bancos centrales continúen con la política de tipos cero que presiona sus márgenes. El brexit, la victoria de los partidarios de que Reino Unido abandone la Unión Europea, está en vías de convertirse en la nueva piedra en el camino de la banca europea y de los españoles. Desde que se conociera el resultado de la votación el pasado viernes, los bancos españoles cotizados se han dejado 23.000 millones de capitalización bursátil. De valer 141.000 millones de euros antes de conocerse el resultado a capitalizar actualmente 118.000 millones.Un fuerte castigo en Bolsa que no ha sido igual para todos, ya que Santander, una de las entidades más expuestas a Reino Unido, se ha dejado más de 10.000 millones por el camino; mientras que BBVA ha perdido unos 6.000 millones. Una pérdida de valor en Bolsa, la llamada capitalización, que no hay que confundir con el capital que le permite hacer frente a situaciones de riesgo futuras. Una caída que hace que la pregunta más repetida sea ¿pero por qué caen los bancos en Bolsa, entiendo que Lloyds o Barclays, incluso Santander o Sabadell, caigan pero el resto? La pregunta tiene distintas respuestas pero que giran en torno a dos catalizadores que pueden golpear fuertemente a la banca, por un lado la libra y por otro los tipos de interés. El llamado brexit no tiene ningún tipo de precedente histórico, por lo que se desconoce cuánto se puede alargar el proceso, qué estatus tendrá Reino Unido con respecto a la Unión Europea y qué relaciones del mercado único podrían desaparecer o mantenerse.


Una serie de incógnitas que preocupan al mercado y en espacial a la libra esterlina. Y ahí es donde pueden aparecer los problemas de los bancos. En un mercado global como el que tenemos en la actualidad, la oscilación de una divisa de referencia como la libra, el dólar o el euro puede tener repercusiones para los mercados financieros. Actualmente, la libra cotiza frente al dólar a 1,3281 dólares; después de que el lunes tocara mínimo de 31 años frente al billete verde. Un precio que supone una caída de más de un 10% frente a la cotización de la libra antes de la votación.
¿Y esto cómo afecta a las acciones de mi banco? Aquí hay dos tipos de bancos, los que tienen exposición directa a Reino Unido y los que no. Entre los que tienen exposición directa en España están Santander y Sabadell, ya que Reino Unido supone casi una cuarta parte de sus beneficios. Su dependencia sobre la libra es capital ya que repatrían sus beneficios en euros, por lo que cualquier depreciación de la libra supone menores beneficios. Este lunes, Banco Santander señalaba a la CNMV que mantenía su previsión de beneficio para 2016, pero Ahorro Corporación calcula que una depreciación de un 30% de la libra esterlina supondría una caída del 7% de su beneficio.
Los que no tienen exposición directa en Reino Unido, tienen intereses allí ya que la Citi londinense es la plaza financiera principal del Viejo Continente. Como recientemente señalaba el profesor del IEB, Javier Santacruz, a INVERTIA “todos [los bancos] acuden al interbancario, por lo que tarde o temprano se van a ver afectados”. Es decir, que los bancos se van a prestar unos a otros; si no se fían de una entidad o prevén determinadas circunstancias se podría llegar a un punto similar al vivido tras la caída de Lehman Brohters en el que nadie se prestaba. Y como todas las divisas están correlacionadas, si se te encarece el dólar al final acabas pagando lo que haga la libra.
Pero también hay un segundo punto, las entidades no son particulares por lo que cualquier tipo de operación que implique divisas o un riesgo país se hace con un seguro por detrás, ya sea de cambio o de riesgo. El brexit ha encarecido sobremanera el coste de asegurar activos british, así a principio de año asegurar 10 millones de deuda de bancos ingleses costaba 80.000 euros; mientras que ahora tiene un coste superior a los 100.000 euros. Y pensando en el accionista, mayores costes son menos beneficios y por lo tanto menor dividendo.
LIBOR Y EURIBOR
La evolución de la libra esterlina tiene una relación directa con el Líbor, el tipo de interés interbancario medio al que se otorgan préstamos los bancos a corto plazo en el mercado londinense. El Líbor es el primo inglés del Euríbor, por lo que cualquier impacto de la libra en el Líbor tiene una transmisión a medio plazo o tensiones en el Euríbor, que sí impacta directamente en los bancos españoles y en los hipotecados, ya que es el índice de referencia mayoritario en España.
Pero queda otra implicación para la banca, los tipos de interés. Una decisión como la del brexit se desconoce sus resultados; aunque los más agoreros hablan de recesión en Reino Unido y el FMI estimó que podría restar entre un 1,5% y un 9,5% del PIB de Reino Unido. Un golpe mortal para la frágil economía mundial y que podría presionar a los bancos centrales a seguir con sus políticas monetarias no convencionales.
El primero en dar un paso a este respecto fue la Reserva Federal, que decidió mantener el precio del dinero en el mínimo de 0,25%-0,50%. Incluso su presidenta, Janet Yellen, reconoció que la incertidumbre de hasta dónde podía llegar el efecto del brexit recomendaba ser prudentes.
El Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés) han aclarado que van a proveer la liquidez necesaria para que los mercados no se vean ahogados por la falta de liquidez en libras y euros. Un suceso, el del brexit, que puede hacer que ambos bancos centrales sigan con su política de tipos cero y su programa de compra de activos. Lo que significa que la banca europea y española verán que sus márgenes van a seguir presionados y restando de su beneficio.
¿RECESIÓN EN REINO UNIDO?
El miedo a una nueva recesión sobre Reino Unido, con las implicaciones que puede tener para el resto de Europa, preocupa a los mercados. De hecho, el ministro de Finanzas británico, George Osborne, ha anunciado este martes queReino Unido tendrá que afrontar una subida de impuestos y un recorte de gasto como consecuencia del desafío que supone la salida de la Unión Europea.
Las denostadas agencias de calificación durante la crisis no han tardado en rebajar el rating a Reino Unido. Tanto Standard and Poors como Fitch han recortado la nota a largo plazo desde AAA a AA, en grado de inversión, por el brexit.
Una tercera vía de agua para la banca española y europea. En el caso de los bancos británicos o con negocio allí esta supuesta recesión podría mermar su beneficio, sin contar lo que suponga el desplome de la libra; en el caso de España podría afectar tanto al turismo como a la venta de viviendas.
Uno de cada cuatro viajeros de Reino Unido viene a España –más de 15 millones al año- y su aportación representa más del 1% del PIB, unos 14.000 millones de euros. Con un gasto medio de unos 1.000 euros por cabeza, la caída de la libra podría pasar factura a lo que se gastan en España. Según datos del Colegio de Registradores, los británicos encabezan la compra de vivienda de extranjeros en España. Un 21% de las viviendas que se venden a extranjeros en España las compran británicos. Un mercado inmobiliario y del turismo que tiene un impacto directo en los bancos españoles.
Una tormenta perfecta para que un sector débil como el bancario recaiga de nuevo. Un miedo que se ha dejado notar en los inversores en el sector financiero, que ha sido uno de los más castigados en Bolsa ante los interrogantes que abre el brexit para el sector. 23.000 millones de capitalización que se han esfumado ante un suceso que puede suponer un buen pellizco para el beneficio de la banca.
Ramón G. Cepas / www.invertia.com

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