jueves, 29 de noviembre de 2012

18 consejos para tener éxito según Richard Branson (Parte I)

Richard Branson es uno de los hombres de negocios que personalmente más admiro. Fundó Virgin en 1970 a la edad de 20 años, y no ha mirado nunca atrás. Él es el único empresario que ha construido ocho diferentes compañías multimillonarias en ocho diferentes industrias - y lo hizo todo sin un título académico en negocios.
"Si hubiera seguido mis estudios el tiempo suficiente para aprender todo lo que hay y no hay que hacer a la hora de comenzar un negocio a menudo me pregunto cómo habría sido mi vida y mi carrera”, escribe en su nuevo libro, Like a Virgin: Secretos que no te enseñarán en una Escuela de Negocios. He aquí una recopilación de los mejores consejos de su libro que espero les ayuden en la vida y en los negocios.
No lo hagas si no lo disfrutas

1. No lo hagas si no lo disfrutas.
Manejar un negocio requiere de mucha sangre, sudor y lágrimas (y cafeína). Pero al final del día, debe ser la construcción de algo lo que te llenará de orgullo.
Branson dice: "Cuando empecé Virgin desde un sótano en el oeste de Londres, no había ningún gran plan o estrategia. Yo no tenía la intención de construir un imperio de negocios... Para mí, construir un negocio es hacer algo de lo que estés orgulloso, reunir a gente con talento y crear juntos algo que vaya a cambiar las vidas de otras personas."
2. Sea visible
Branson recibió algunos eternos consejos de Sir Freddie Laker,  magnate de una aerolínea británica, cuando puso en marcha Virgin Airlines.
“Asegúrate de que apareces en la primera página y no en las últimas” decía Laker. “Vas a tener que salir ahí fuera  y venderte a ti mismo. Haz el tonto, haz lo que sea necesario. De lo contrario, no sobrevivirás”
Branson siempre ha hecho lo posible por viajar a menudo y conocer a tanta gente como le ha sido posible. Así, dice, es como ha encontrado algunas de las mejores sugerencias e ideas para su negocio.
3. Elige nombre de tu marca de forma inteligente
El  nombre único y marca que Virgin utiliza es una de las cosas que le ha dado el éxito. Branson se asegura de que el nombre “Virgin” represente un valor añadido, un servicio mejorado y un enfoque fresco y sexy.
Branson dice que todo el mundo le pregunta sobre el origen del nombre de Virgin, desde que Virgin se fundó. “Una noche, estaba tomando unas copas y charlando con un grupo de chicas de 16 años sobre un nombre para la tienda de discos” dice. “Surgieron un montón de ideas y como todos éramos nuevos en los negocios, alguien sugirió la palabra Virgin. La palabra evocaba a algo fresco y nuevo, aunque en aquella época la palabra era todavía ligeramente arriesgada, por lo que pensamos que eso captaría la atención de la gente, así que nos quedamos con ella”.
4. No puedes dirigir un negocio sin correr riesgos
Branson piensa en una de sus frases favoritas acerca de tomar riesgos empresariales:
“El valiente puede que no viva para siempre, pero los cautos no viven en absoluto”
Cada negocio conlleva riesgos. Prepárate para caerte, dice Branson, porque el éxito pocas veces llega del juego seguro. Puedes fracasar, pero Branson también se atreve a señalar que “no existe un fracaso total”.
5. La primera impresión lo es todo. Así como la segunda.
La primera impresión que causas en los clientes será probablemente cuando los captes. La primera impresión es extremadamente importante, dice Branson, pero la segunda es igualmente importante.
La segunda vez  que un cliente contacta con Virgin, por regla general es porque él o ella están teniendo problemas con el producto o servicio. Cómo te presentas a ti mismo y a tu marca en estas situaciones dice muchísimo sobre como tu marca mantiene buenas relaciones con los clientes y como maneja los obstáculos.
6. La perfección es inalcanzable
“Hay un peligro inherente en permitir que la gente piense que ellos han perfeccionado algo” dice Branson. “Cuando creen que han dado en el clavo, la mayoría de la gente tiende a dormirse en los laureles mientras que muchos otros trabajan furiosamente para mejorar su trabajo”
Por esta razón, Branson nunca le da a nadie una crítica 100% perfecta sobre su trabajo. El cree que no importa lo brillantemente que se haya hecho algo, siempre hay espacio de mejora.
7. El cliente siempre tiene razón, la mayoría del tiempo.
El cliente siempre tiene razón…a menos que se equivoque. Después de todo, ellos también son solo humanos.
Las opiniones de tus clientes son importantes pero “no deberías basar tu servicio de atención al cliente bajo la premisa de que tu organización nunca cuestionará los caprichos de tus clientes” dice Branson.
Branson advierte que muchos empresarios piensan que si dan el servicio de  “el cliente siempre tiene la razón” mejorarán sus negocios. Esto solo es cierto algunas veces. Tenga cuidado de no dañar las relaciones con los clientes o empleados con las políticas de servicio al cliente.
8. Define tu marca
Cuando se trata de definir tu marca, Branson aconseja a los empresarios a hacer lo contrario de lo que hizo con  Virgin, que se está extendiendo por todos lados. Y si bien es cierto que Virgin se extiende  en muchas industrias diferentes, Branson dice que la compañía está en realidad muy centrada en una cosa: ". Encontrar nuevas maneras de ayudar a la gente a pasar un buen rato"
Aténgase a lo que sabe. Pocas promesas y muchos logros. Porque si no define su marca, sus competidores lo harán.
9. Explora un territorio desconocido
Branson compara explorar nuevos territorios en los negocios a explorarlos en ciencia o geografía.
"Encontraremos nuevas especies y una mejor comprensión de las aguas profundas ", dice Branson.
Traducido a los negocios: Hay todavía muchas cosas por ahí que no se han descubierto, inventado, logrado. Explorar  áreas pequeñas o desconocidas puede generar nuevas ideas e innovaciones.

 lacartadelabolsa

Comentarios

Hace unos días recibí un mail.
“Me presentaré, me llamo R. R. y soy arquitecto de (nombre de una ciudad española). Tengo 39 años y, con ese dato puede suponer que algo de trabajo pillé en la época del boom de la construcción.
Pero ahora las cosas han cambiado mucho. Comparto despacho con compañeros de mi misma profesión, a parte de estar en contacto con otra gente del gremio e industriales y trabajadores de la construcción.  Poco a poco estoy viendo que es cuestión de tiempo el que empecemos a estar todos apurados económicamente, ya que todos estamos embarcados en deudas más o menos importantes.
El trabajo ya hace tiempo que escasea y las perspectivas son pésimas. En el colegio de arquitectos, hay muchos colegiados que ya no pagan las cuotas e incluso, se dejan de pagar las cuotas del seguro de responsabilidad civil de las obras realizadas, lo que es mucho más grave. (la administrativa del departamento de visados me ha comentado que hay muchos arquitectos que solicitan el visado urgente para poder cobrar lo antes posible de sus clientes e inmediatamente ingresar el dinero en el banco para pagar la cuota de la hipoteca…) Los que todavía no hemos llegado a esa situación, tiramos de ahorros.
Mi reflexión es la siguiente: nos sacan datos de paro pero no nos comentan o no se sabe o no interesa que se sepa en qué situación estamos los autónomos. Pienso que la situación es mucho más difícil que la que nos cuentan e incluso más difícil que la que Ud. nos plantea. Pienso también que, en cuestión de meses, la situación será irresistible para la mayoría de la población, que deberá decidir si pagar las deudas al banco, o dar de comer a su familia. Y esa situación límite creo que está a punto de llegar, quizá este invierno?…
Viendo este panorama le pregunto, ¿se irá prolongando esta situación agónica hasta el infinito o habrá un crack brutal y repentino? Como verá, no pretendo que me dé palabras de esperanza porque no soy tonto y sé lo se nos viene encima…”
Mi respuesta fue:
“Un hundimiento de todo en todas partes, no: no estamos en los 1930s; de hecho pienso que un mayor deterioro no se producirá (deterioro en el sentido de destrucción de actividad por efectos del agotamiento del que ha sido nuestro modelo) ya que lo que lo producía ya ha finalizado.
A lo que sí, pienso, asistiremos es a un estancamiento de unos dos años producido por la no existencia, aún, de nuevas herramientas y por la aplicación de la econoterapia: la quimioterapia que se irá administrando a fin de revertir el cáncer que afecta al modelo en crisis.
Obviamente, la percepción por parte de la ciudadanía de los efectos de tales políticas será de que las cosas van a peor: cerrarán empresas, la tasa de desempleo aumentará, el consumo descenderá, la recaudación fiscal disminuirá, …, pero será por los efectos de las medidas que se estarán adoptando ya que de hecho, esa fase constituirá la transición hacia el nuevo modelo.
Lo que dice sobre su profesión, pues si: es brutal: la tasa de desempleo entre estos profesionales alcanza el 65%, y aquí estamos hablando de alta cualificación. Es un buen ejemplo de lo que viene: pienso que Arquitectura es una de las profesiones que tiene que reinventarse e ir hacia lo que yo denomino el Sector R: Rehabilitación, Reparación, Reciclaje, Reutilización, Retransformación, Recuperación, …”.
Puede que estuviese especialmente receptivo, pero ha sido uno de los mails más impactantes que he recibido.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

martes, 27 de noviembre de 2012

Setenta y ocho

La cifra del título es el resultado de sumar las tres que Iberia (‘Líneas aéreas de España’, ¿recuerdan?) ha dado como referente es su plan de ¿saneamiento?, ¿salvación?, ¿viabilidad?: reducción del 15% de los vuelos que realiza, del 23% de su plantilla (‘fuerza de trabajo’ se decía antes), de entre en 25% y el 35% (el 30% podemos tomar) en las remuneraciones de esa plantilla. Pienso que Iberia es un muy buen ejemplo.
El pasado, pasado -dejemos aun lado que en la aerolínea, antes y masantes, se hayan hecho burradas increíbles en la gestión y que se hayan tomado decisiones alucinantes e incomprensibles-, la realidad es que las cosas son las que son, y, ¿cómo son?.

Iberia tiene un problema de ingresos: no ingresa lo que debería en base a la estructura de costes que tiene, una estructura de costes que fue la adecuada cuando la cifra de ingresos fue la que fue, unos ingresos hoy no posibles de alcanzar y previsiblemente imposibles de lograr en el futuro inmediato (y menos aún, pienso, en el lejano); luego esa estructura de costes debe ser modificada.
La dirección tiene pensado eliminar rutas y frecuencias deficitarias y reorganizar operaciones y procesos, por lo que la compañía necesitará menos trabajadores y trabajadoras, pero, además, como otras compañías pagan a su personal menos que Iberia, esta tiene que pagarles menos a fin de no incurrir en descompetitividades. Y para dar ejemplo la plana mayor se reduce su fijo en línea con lo que va a reducir el de la plantilla. Y argumenta: si esto no se acepta se prescindirá de más personal a fin de alcanzar los costes laborales deseados. Y amenaza: y si se plantean huelgas, los números planteados se retorcerán. De manual, vaya.

Iberia es un muy buen ejemplo de compañía adaptada a unas circunstancias que ya no se dan, por lo que debe readaptarse: eliminar lo que ya no y centrarse en lo que sí a costes de hoy. Lo primero tiene una lógica aplastante, claro que llevado al límite puede tener unas consecuencias tremendas: ¿por qué seguir haciendo tal cosa aunque no haya alternativa si el coste de hacer esa tal cosa nunca se va a recuperar y el ingreso que genera es de todo punto insuficiente, por lo que, como dice un refrán catalán, ‘Es más caro el relleno que el pollo’?. No piensen sólo en conexiones aéreas, utilicen su imaginación. Lo segundo abre una puerta hacia un lugar totalmente desconocido.

Hasta esta crisis sistémica y desde que a principios de los 1950s se puso en marcha el que fue nuestro modelo, el objetivo fue siempre ir a más, y para ello fue necesaria más población activa a fin de ocuparla y remunerarla para que consumiese y pagase impuestos, y para que se reprodujese y perpetuase el proceso. Pero todo eso ya ha dejado de ser así aunque se quiera continuar creyendo que sigue siendo así.
En general, menos vuelos debido a que la necesidad de desplazarse va a reducirse: las TICs, la desaparición de negocios no sostenibles, el encarecimiento del combustible, y la caída de la renta media acompañada de una disminución drástica de la capacidad de endeudamiento, pondrán de manifiesto un exceso de capacidad aérea planetaria. Lo que vendrá acompañado de una reducción de los elementos-que-hacen-posible-volar entre los que se encuentra el factor trabajo que actualmente está posibilitando que se vuele; a esto en concreto añadan la automatización de una serie de operaciones que reducirán aún más tales necesidades de factor trabajo y sumen mejoras organizativas que aún las deprimirán más. Iberia como ejemplo, pero extiendan el razonamiento.

En cuanto al factor trabajo, ¿qué puede esperarse?, pues un aumento espectacular de eso tan feo de lo que nadie habla: el desempleo estructural: un desempleo endémico y enquistado debido a que existen un montón de horas de trabajo que ya no son necesarias, lo que traducido en personas supone una parte innecesaria de la población activa, es decir excedentaria.
Y no, repartir el tiempo de trabajo no será la solución prácticamente en ningún subsector ni actividad, aunque lleve aparejada una reducción del salario: al margen de que con el reparto del tiempo de trabajo la productividad cae, se entraría en una dinámica de desempleo encubierto y de subremuneración difícil de entender y más difícil aún de aceptar.

Iberia como ejemplo, si. Iberia como ejemplo.
(Y la RL, ya ven: sirviendo para que las grandes Cias. adecuen sus efectivos humanos a sus necesidades actuales y a sus expectativas. ¿Pero se ponía en marcha para crear empleo, ¿no?).
@sninobecerra
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

La psicología de un bróker deshonesto

La reciente condena a siete años de cárcel al intermediario financiero del banco suizo UBS Kweku Adoboli en Reino Unido, por un fraude estimado en US$2.300 millones, ha vuelto a poner en la palestra el rol de los actores del mundo de las finanzas y sus manejos turbios.
Antes del escándalo, el operador de bolsa de origen ghanés y educado en suelo británico era considerado una estrella en ascenso en su empresa. ¿Pero qué sucedió para que este joven exitoso de 32 años se derrumbara precipitosamente? ¿O la deshonestidad es, tarde o temprano, algo que tienta a todos los agentes de bolsa? Se pregunta Laurence Knight, de la BBC.
¿Por qué los corredores de bolsa pierden la honradez en el camino? ¿Le pasa a la mayoría o son casos aislados? ¿O es precisamente lo que los hace jugar sucio, lo mismo que los motiva a trabajar?
Antes de responder a estas preguntas debo aclarar que durante seis años trabajé en un banco de inversión. Mi trabajo no era de agente de bolsa pero sí debía interactuar con ellos a diario.
Bruno Currier fue el encargado de entrenarme en 2002, junto a otros 200 graduados, y transmitirme los conocimientos básicos de los mercados financieros.
"Un intermediario financiero es alguien que se plantea obtener beneficios a corto plazo", me dice Currier.
"El foco en el objetivo es tan potente que a veces los fines justifican los medios", añade.
Esto concuerda con mi propia experiencia. La autoestima de muchos agentes depende casi exclusivamente de las ganancias y las pérdidas que generan para el banco y, por ende, del bono que reciben como consecuencia.
Una transacción favorable demuestra que saben lo que hacen, y cuánto más grandes son las ganancias, queda más en evidencia todo lo que saben.
Y en cuanto a los bonos gigantescos, su importancia radica más en el estátus que en el beneficio material que le aportan al operador.
En el caso de Adoboli, él mismo negó que su motivación haya sido obtener un beneficio material personal. El agente dijo que estaba obsesionado en aumentar las ganancias, por la presión de obtener buenos resultados.
En sus declaraciones, Adoboli da a entender que sus pérdidas se debieron más a la mala suerte que a su comportamiento irresponsable.
Coeficiente intelectual vs. coeficiente emocional
¿Pero por qué los bancos contratan a gente cuya conducta es digna de un apostador?
"Los bancos ponen el énfasis en la competencia técnica", dice Currier. En cambio, al coeficiente emocional no se le presta mucha atención, añade.
Según Currier, muchos corredores de bolsa no tienen la capacidad de comprender sus propias emociones y cómo estas afectan a los demás.
La imagen del agente como un ser agresivo, al que no le tiembla el pulso a la ahora de asumir riesgos atrae a los candidatos con estas características.
Además, son los mismos agentes los que eligen a los futuros corredores que trabajarán para ellos.
Pero, demás está decir, no todos están hechos de la misma madera y Currier quiere dejar en claro que a lo largo de su carrera se ha topado también con muchos operadores de bolsa de estándares éticos elevados.
Tres clases
Mi experiencia personal es que hay tres variedades, y cada una de ellas depende de la clase de mercado en el que trabajen.
Los más típicos son los que trabajan en los mercados más simples, más rápidos y más competitivos, como el de monedas o acciones.
Luego, están aquellos que se ocupan de opciones financieras o transacciones más complicadas.
Son los más listos, los que necesitan tener una intuición sobre los procesos matemáticos involucrados en la operación y los que, a veces, explotan cuando los cálculos les fallan.
Y, finalmente, están los que se dedican por meses a una transacción grande y que ganan millones de dólares.
Ellos también son reflexivos e inteligentes, pero sus pensamientos están dirigidos principalmente a las tácticas de negociación y la contabilidad.
Psicología masculina
Casi la totalidad de los que yo he conocido se encuentran entre las dos primeras categorías.
Y la gran mayoría son hombres. ¿Por qué? La respuesta está en la psicología masculina. Según un estudio de 2007, los agentes son más exitosos cuando tienen niveles elevados de hormonas como la adrenalina, el cortisol y la testosterona.
Estas hormonas los preparan físicamente para la batalla, haciéndolos más persistentes e interesados en asumir riesgos.
El éxito en las transacciones provoca a su vez un aumento en los niveles hormonales y, por ende, el agente se siente capaz de tomar aún más riegos.
Una de las desventajas es que el ganador se siente inquieto, y ahí es cuando muchas veces, le explica a la BBC John Coates, banquero y coautor del estudio, a muchos agentes se les va la situación de las manos.
Continuar apostando
La última pieza del rompecabezas es la trampa mental en la que se ve atrapado el agente cuando se le acumulan las pérdidas y se le acerca una fecha límite para presentar sus ganancias.
Tiene dos opciones: confesar sus pérdidas o doblar su apuesta con la esperanza de recuperar rápidamente lo que ha perdido antes de que lo descubran.
El problema para el banco es que en algún momento las pérdidas generadas por el corredor llegan a un tope. Él sabe que lo peor que le puede llegar a pasar es perder su trabajo y enfrentar cargos criminales.
Mientras tanto, el banco deberá hacerse cargo de las pérdidas.
Si el corredor opta por doblar su apuesta, puede que lo siga haciendo hasta que las sumas de dinero perdidas se vuelvan astronómicas.
Adoboli dobló su apuesta dos veces y en ambas ocasiones el mercado le jugó en contra.
Su caso me hace pensar en cuántos agentes deshonestos hay por ahí, que tienen la gran fortuna de pasar inadvertidos.
Fuentes: Laurence Knight - BBC

“Muchos hogares españoles y mundiales deben todo: casa, coche, tv, móviles, vacaciones…”

"¿Cuál es la deuda total del mundo, es decir, la suma de la deuda de los Estados, Autonomías, Corporaciones, Ayuntamientos, Empresas, Familias e Individuos? Si estamos instalados en lo que ya la mayor parte de los sabios definen como Crisis de la Deuda (y no sólo de la Deuda Pública) ¿por qué no aceptar este reto? Hay estudios rigurosos que demuestran que la Deuda Total es impagable, porque la alternativa de algunos Gobiernos como los de EEUU y Japón (de China no sabemos nada, porque las cifras oficiales son escasamente transparentes) de darle a la manivela las ha hecho aún más impagables. Vivimos, no obstante, en España ¿cuál es la foto fija del endeudamiento total? Los sabios hablan del equivalente al 350% del PIB. Quedan muchos años por delante para tratar de corregir desviación tan monstruosa. Sí, una España endeudada, como otros tantos países, hasta las cejas. Numerosos hogares españoles deben todo, absolutamente todo. Deben la casa donde viven. Deben las cosas que contiene la vivienda, como la televisión, el móvil, el microondas, la lavadora, el frigorífico y demás electrodomésticos. deben, además, el coche y por deber, deben las vacaciones del años pasado, que las disfrutaron con un crédito. No es ninguna broma absurda. Es una de las grandes atrocidades de una sociedad, que, como la española, sufre ahora en sus carnes el cerrojazo del crédito. ya no hay más gasolina para seguir consumiendo", me dice el analista jefe de una gestora de fondos.

Traigo, así, el siguiente artículo: La economía mundial navega en un mar de deudas. La suma de la deuda estatal, provincial, municipal, individual, hipotecaria, corporativa, financiera y bancaria sugiere que en cualquier momento la nave puede naufragar o estrellarse contra el témpano de lo impagable.
Un colosal estudio comparativo de la consultora Mc Kinsey Global Institute mostró que en 2009 la deuda total de Japón -la más grande del mundo desarrollado– era de un 471% de su PIB (es decir, de todo lo que produce su economía en un año). Le seguía Reino Unido con un 466%. Estados Unidos "apenas" tenía un 300%.

Muchos economistas opinan que esta gigantesca desproporción entre la riqueza anual que produce un país y lo que adeuda se explica por un mecanismo que en las últimas tres décadas ha cambiado la faz del capitalismo actual: la financiarización.

"Es una manera de conceptualizar la creciente importancia de actores e instituciones financieros en la economía y de las finanzas como fuente de ganancias. Esto explica el crecimiento del crédito en la década de 2000 y las causas de la actual crisis", le explicó a BBC Mundo Adam Leaver, autor de tres libros sobre el tema e investigador y miembro de CRESC (Centro de Investigación del Cambio Socio-Cultural) de Manchester.
En el capitalismo tradicional, los bancos le prestaban a la industria que producía ganancias con el consumo de sus productos, dinero con el que pagaba su crédito, alegraba la vida de sus accionistas y reinvertía para ampliar el proceso productivo.
En el capitalismo de las últimas tres décadas se produce una explosión de lo que en inglés se denomina con la sigla FIRE (Financiamiento, seguro y sector inmobiliario) que ha crecido tanto en proporción al PIB como en detrimento de la economía productiva.

Hagan juego

Las grandes corporaciones tienen ramas financieras que con frecuencia generan más ganancias que lo que las empresas producen y venden. En Estados Unidos la General Motors pasó a ganar más con el otorgamiento de créditos para la adquisición de automóviles que con la misma venta de vehículos.
"Las empresas del sector real, productivo, empiezan a comportarse como empresas financieras. La misma General Motors estuvo en la venta de hipotecas de casas. Uno puede argumentar que prestar plata para que le compren autos entra en la lógica productiva. Pero invertir en el mercado hipotecario es otra cosa. Funciona como sustituto de una inversión productiva para obtener una ganancia a corto plazo. Es una clara señal de cómo la financiarización afecta la inversión y el cambio tecnológico", indicó a BBC Mundo el profesor de economía comparada de la Universidad de Cambridge Gabriel Palma.
A nivel individual, el símbolo más cotidiano de esta financiarización es la tarjeta de crédito, que antes de los '80 era tratada con reverencia de club exclusivo y hoy se ha convertido en un medio de pago de la vida diaria.

Pero la explosión del crédito va mucho más allá de la tarjeta. En el estallido financiero de 2008 la gota que desbordó el vaso de una economía endeudada hasta las cejas fue el préstamo hipotecario a hogares sin recursos: las llamadas hipotecas subprime o de alto riesgo.
Los estudios sobre el período del boom muestran que en Estados Unidos los hogares pasaron a gastar en el pago de intereses de tarjetas de crédito y préstamos casi el doble de lo que gastaban en comida y vestimenta.

En Reino Unido la deuda individual o familiar llegó a ser un 165% del ingreso disponible (ingreso que queda luego de pagados los impuestos).
Según Paolo Dos Santos, experto bancario de SOAS, la Escuela de Estudios Africanos y Asiáticos de la Universidad de Londres, este cambio vino de la mano de un repliegue del estado benefactor como garante de salud, educación, vivienda y jubilación que fue funcional para la expansión del sistema financiero.
"En los últimos 30 años, la política social en muchos países desarrollados se ha basado en la transferencia del riesgo y el costo de estos servicios sociales del estado al individuo. Este tiene que recurrir al sistema bancario para poder financiar la educación de su hijo o un seguro médico o su jubilación", señaló Dos Santos a la BBC.

¿Y en América Latina?
La financiarización es un proceso global, pero en América Latina aparece acentuada por la falta de regulación y competencia.

Si uno toma como ejemplo el reciente balance anual del banco español Santander se ve que Brasil y Chile arrojan ganancias infinitamente superiores a las de países desarrollados.
"Brasil, por ejemplo, tiene el 15% de los activos del Santander, es decir, sus préstamos para consumo, empresas, etc., pero representa el 30% de sus utilidades mundiales. En países como el Reino Unido es a la inversa. La falta de regulación y competencia les permite a los bancos obtener ganancias absurdamente altas", señaló Palma a BBC Mundo.

Dicho de otra manera, las ganancias no se deben a una meritoria competitividad comparativa de América Latina en términos de calidad, servicio y eficiencia sino a las fallas del sistema regulatorio en que operan.
El Partido de los Trabajadores de Lula ha sido elogiado por los grandes centros financieros mundiales por su política "realista", pero un informe reciente de la Federación de Comercio de San Pablo muestra que la tasa de interés promedio que pagan los brasileños es del 230% anual.

El cálculo es que el servicio de la deuda individual brasileña será de un 30% del ingreso disponible este año. En Estados Unidos se considera que cuando la deuda alcanza el 14% la situación es de alto riesgo.
Brasil y Chile no son excepciones. En Perú el crédito se cuadruplicó en esos cinco años. En México el nivel de morosidad en el pago de microfinanciamiento del consumo se sitúa entre el 20 y el 30%.

"El crédito aceita la economía, pero un exceso de deuda en el ingreso de los hogares se traduce en un estancamiento del consumo. En América Latina el problema no es el monto de la deuda sino su servicio por las condiciones leoninas que tienen muchos créditos. Esta financiarización tiene un impacto en la inversión. Es más negocio ganar con un producto financiero que invertir en la economía real. Una parte importante de la élite industrial de Sao Paulo abandonó la producción por las finanzas", indicó a BBC Mundo Palma.

viernes, 23 de noviembre de 2012

Dos mil sesenta

Como sabrán, recientemente la OCDE ha publicado un informe de título “Looking to 2060: Long-term growth prospects for the world” (Si están interesados accedan aquí y vayan mirando: http://www.oecd.org/newsroom/balanceofeconomicpowerwillshiftdramaticallyoverthenext50yearssaysoecd.htm). Respecto a ese informe una amiga me remitió un mail en el que me preguntaba que me parecía. Le respondí lo siguiente:

“La OCDE ha publicado unas previsiones para el 2060. Cuando llegue ese año, dice el infore, China e India serán, de largo, las economías más potentes del planeta (a partir del 2030). La UE y Japón, continúa, reducirán su importancia a la mitad y el peso de USA habrá retrocedido siete puntos. En cuanto a crecimiento medio anual, para que te hagas una idea, el de la India será del 4,4%, el de China el 4,2%, Brasil el 2,6%, Arabia Saudí el 2,0%, UK el 1,6%, USA el 1,5%, España el 1,4%, Francia el 1,3%. (No sé como ha hecho la OCDE ese estudio, pero para sacar esos números a 50 años, la única forma es suponiendo cosas: tasas de consumo, de inversión, ...).
Luego es muy curioso lo que dice. Dice que el envejecimiento de la población será un lastre, pero a la vez dice que cambiarán los 'patrones de crecimiento' y que el ahorro -público: para pagar la deuda, y de China e India- favorecerá el crecimiento. (Mi lectura: se liquida a ancianos y no-útiles, se paga a las corporaciones lo que se les debe, se crea ahorro forzoso en diversas zonas que se canaliza hacia los centros de actividad).
Lo que ha hecho la OCDE, pienso, es 'prolongar la recta': China es gorda hoy luego en el 2060 lo será un X% más,  introduciendo parámetros que ya son obvios del tipo: 'la deuda USA es insostenible'. Fíjate en que en 60 años, el estudio, continúa manteniendo la estructura de Estados como hoy, y no considera que ninguna innovación, energética, por ejemplo, pueda aparecer y suponer un revulsivo”.
Francamente, no veo la utilidad de este tipo de informes tan detallados en los momentos actuales: una crisis sistémica que barrerá todo lo establecido y que implementará un nuevo modelo con nuevas normas y nuevas formas de hacer. Serían muy útiles, pienso, estudios que dibujaran tendencias y probabilidades de ocurrencia, que contemplaran amplios supuestos y opciones. Estoy convencido de que tales estudios se elaboran, lo que sucede es que no se publican para el hombre de la calle.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

“Ellos”, los poderosos que nos llevan al abismo

Durante los últimos 10 años la deuda global ha aumentado desde 80 trillones (escala corta) hasta 200 trillones. Los gobiernos de  Europa y EEUU adeudan buena parte de los 200 trillones citados. Entonces, si el conjunto de ambos bloques tiene un PIB anual de aproximadamente 26 trillones y recaudaciones de menos de 4 trillones, después de presupuestar las recaudaciones para cubrir los gastos generales del estado/s, ¿cuánto dinero queda para pagar los intereses de la deuda? ¿Cuánto dinero queda para pagar la propia deuda? Puesto que la pregunta es retórica la respuesta es mucho menos de cero, o sea, negativa. Dicho esto, si con lo que recaudan ni siquiera tienen para pagar los intereses de la deuda, muchísimo menos para pagar la deuda, ¿cómo pagan los intereses? Los pagan endeudándose más hasta que se acabe el chollo y los prestamistas, que somos todos nosotros, digamos ¡se acabo! Mientras tanto, para poder seguir apoltronados en el poder y en la opulencia, manufacturan inflación por medio de la creación de masa monetaria. Lo cual es una transferencia de riqueza desde ahorradores hacia  deudores –he de recordar que los deudores son mayormente ellos y sus protegidos, los bancos. Es más, no solamente manufacturan inflación para reducir la deuda tramposamente y salvar sus pellejos políticos, sino que además mienten y nos dan cifras irreales, mentirosas; el 3,4% de inflación es irrisorio.
Es cierto que algunas cosas, muy pocas, como la inmobiliaria están pasando por un proceso deflacionario, pero repasemos las que verdaderamente cuentan: la gasolina que ponemos en el coche, los huevos, la leche, el pan, la carne, el pescado, el café, el azúcar, los impuestos, el IVA, el metro, autobús, electricidad, gas, ropa, calzado, libros de texto, renta etc., etc. ¿Han subido un 3,4%? O más bien nos están estafando para poder seguir con el albedrío al que los tenemos acostumbrados. Por supuesto que la inflación real afecta incluso a un ermitaño, afecta a quien come, bebe, anda, viaja, duerme y a quien de vez en cuando se enferma. No me cabe la menor duda de que la inflación que vivimos, la real, no es nada más que la punta del iceberg inflacionario que se avecina. Tenemos dos caminos, protegernos o endeudarnos, para endeudarnos el truco está en hacerlo con un préstamo a largo plazo y con intereses fijos y bajos, intereses variables no interesan puesto que en unos años podríamos quedarnos sin pan y sin perro. Si no es posible endeudarse de la manera que acabo de citar no queda otro remedio que aprender a protegernos de la oleada inflacionaria que se avecina, de la tormenta perfecta.
¿Cómo hemos llegado hasta aquí? ¿Ha sido por culpa de ellos? ¿Quiénes son ellos? Según creencias populistas y de los que tienen tendencias conspirativas, “ellos” son los que están en el poder. Para unos el poder son los políticos, para otros los banqueros o grandes brókeres, Goldman Sachs, etc., y para otros el gran capital. La creencia popular es que “ellos”, al final lo arreglarán todo y regresaremos a lo de antes. Sin embargo, gran parte del planeta a causa del optimismo, ya que nunca hemos vivido una guerra mundial ni otras calamidades similares, le negamos a la historia su sabiduría y nos negamos reconocer que los imperios se vienen abajo por diferentes razones. Aunque a veces se han venido abajo por culpa de sequías u otras calamidades ajenas a los poderes, la mayoría de las caídas han ocurrido como consecuencia de guerras, malas gestiones económicas o monetarias, sociedad con nivel de vida decadente y otras decisiones perniciosas de ellos. Está científicamente demostrado que la inteligencia de la humanidad contemporánea, en términos evolucionarios, es idéntica a la de la humanidad de hace seis mil años. Los imperios de antaño también eran regidos por “ellos” quienes también comandaban ejércitos, capitales y territorios. Entonces, ¿dónde están aquellos imperios, porqué dejaron de serlo? ¿Dónde está el imperio egipcio, griego, romano, bizantino, persa, mongol, chino, los norteafricanos, inglés, español, alemán, soviético y otros que ahora omito? ¿Por qué “ellos”, los poderosos emperadores, reyes, banqueros y comerciantes no lo arreglaron todo para evitar la caída?
El jefe de la Reserva Federal de los Estados Unidos, Bernanke, quien obviamente es un principal de los “ellos” descritos arriba, nos ofrece un ejemplo clarísimo de necedad y ofuscación. Resulta difícil comprender que un pupilo de Harvard galardonado con un summa cum laude, estudioso de la historia económica de la gran depresión mundial del siglo pasado, elegido a dedo de presidente y ratificado por el congreso de los Estados Unidos haya cometido errores tan colosales que después ha negado incluso utilizando el poder de la retórica para malversar la realidad y hacernos creer que lo que hizo era absolutamente necesario para salvar el sistema. Más bien, bajo mi punto de vista,  atascó el sistema y lo ha convertido en insalvable, y utilizando su premisa ha llevado a medio mundo a la pobreza permanente.
A cambio, el mundo le profesa una fe ciega y le aplaude cuando en el 2006 dijo: “el precio de la inmobiliaria residencial probablemente continuará subiendo” y en el 2007 dijo “considero que los préstamos basura tendrán poca transcendencia y no contagiarán de manera significativa al resto de la economía ni al sistema financiero.” Después, en el 2008 dijo “Fannie Mae y Freddie Mac están adecuadamente capitalizados y no corren peligro de quiebra” y que “la Reserva Federal no prevé que vaya a ocurrir ninguna recesión”. En el 2009 dijo, “la Reserva Federal no monetizará la deuda.” Esto prueba que una buena educación y un gran título no garantizan ni la verdad ni la ausencia del error. Sin embargo, incluso después de los errores comprobados y sufridos, la ciudadanía al igual que los líderes del mundo, excepto quizás dos o tres, aceptan lo que dice como palabra de dios. Mientras, el bienestar de la sociedad global se deshilvana y amenaza con consecuencias muchísimo más graves de las que ya hemos vivido.
Aun así, después de las malas predicciones, los muchos errores y de su actuación económico-monetaria indigente, continúa presentándose ante el congreso y el mundo sin inmutarse, con el aire del que habla y pronostica con propiedad. Continua hablando con la misma automatización de siempre, incluso después de que afirmó que lo que no pasaría pasó y que lo que pasaría no pasó. Arriesga trillones de dólares con la desfachatez de seguir pensando que está en lo cierto y dando por hecho que su argumento académico le da licencia de alquimista para convertir en realidad su gran experimento con la economía estadounidense y global. Por si fuera poco, como si fuera pastor divino, el rebaño de la mayoría de los gobernadores de los bancos centrales lo admiran e imitan, unos porque saben menos que él de economía, y otros porque no les queda otro remedio y en lugar de aceptar la muerte súbita optan por la más lenta y dolorosa.
La realidad es que para someter la naturaleza del poderío deflacionario actual, inducido por el des-apalancamiento descomunal que comenzó en el 2008, y convertirlo en des-apalancamiento inflacionario, se necesita imprimir indecibles cantidades de dinero. Un fenómeno que raramente ocurre pero cuando sucede, sucede de manera clásica, la cual intentaré explicar a continuación: En todo des-apalancamiento, tanto deflacionario como inflacionario, el promedio de madurez de la deuda/bonos/renta fija se acorta en la misma medida que aumenta el riesgo del impago o el de inflación. Entonces, así como los compradores tradicionales de bonos exhiben menor apetito por estos mecanismos de inversión, los bancos centrales sustituyen a estos inversores naturales, aumentan la compra de bonos y alargan la madurez/caducidad, lo cual se denomina monetizar la deuda.
Al principio de tales manipulaciones monetarias y económicas, aunque acarrean pequeñas consecuencias negativas para la divisa, los efectos son beneficiosos. Ahora bien, si las imprentas son usadas de manera desproporcionada con respecto a las fuerzas deflacionarias derivadas de la austeridad y de la restructuración de la deuda, lo que consiguen es expulsar fuera de la divisa y de los bonos con madurez a largo plazo - 10, 20, 30 años a los prestatarios naturales, o sea, a los inversores en bonos. Lo cual, para evitar el colapso total del sistema fiduciario, obligaría al banco central a pagar rendimientos más altos para frenar el exilio de tales inversores. En ese preciso instante es cuando los llamados bonistas vigilantes toman las riendas y el control de los rendimientos de los bonos, exigen retornos reales con respecto a la inflación y ponen al banco central entre la espada y la pared, dejándolo con poca o ninguna capacidad de maniobra.
Es fácil de reconocer el comienzo de esta fase porque la curva de intereses se dispara al alza en vertical. La divisa se desploma y el colapso de la divisa impulsa la inflación, el crecimiento nominal* y los intereses. El mismo proceso de la mencionada fase actúa al contrario y hunde la divisa de manera que parece un remolino interminable. Ambas fuerzas alcistas y bajistas convergen y se fortalecen mutuamente para engrandecer y agudizar el círculo vicioso, el agujero negro. Solamente puede ser arrestado poniendo los intereses oficiales por las nubes, definitivamente por encima de la inflación, cual a su vez provoca una recesión viciosa que sirve para restituir la economía y para devolver la salud a los ciclos y a las fuerzas que tiran y aflojan de los diferentes vértices económicos y normalmente suele dar paso al ciclo macroeconómico opuesto al anterior.
*En la situación descrita, o sea, en la fase del nefasto proceso inflacionario, tanto mercados de renta fija como los de renta variable se comportan ruinosamente. En el caso de los mercados de valores, aunque pudieran experimentar crecimiento, este sería nominal pero no en términos reales puesto que la divisa en la que el flujo de capital está denominado se desploma y la inflación sube más rápido que la capacidad de las empresas para anticiparla. Incluso aunque pudieran anticipar el diferencial inflacionario no podrían incluirlo en el precio sin perjudicar la competitividad de los productos que comercializan.
El colapso de la divisa, que es consecuencia de todo lo expuesto arriba, provoca altos rendimientos en activos refugio como el oro, cuyo valor sube con respecto a la moneda local, o sea, del país donde el proceso explicado existe. En este caso, como el problema es global, el precio del oro reflejaría el declive del valor de todas las divisas, aunque unas más que otras, con respecto al oro y al poder adquisitivo.
¿Tienes oro?
Escrito por Antolín Blanco, editor de Mercadosyburbujas.com y experto iAhorrador

jueves, 22 de noviembre de 2012

Tweets – 2

Recuerdo algunos tweets que publiqué hace unos días. Veamos. 
02.11.2012:
Sobre población activa España es en la UE uno de los países con menos empelados públicos. España: 15%, Suecia: 31%.
Además, los empleados públicos en España llevan perdido, de media y desde el 2010, un 23% de su poder adquisitivo.
Pero aún así se dice de reducir su número porque no hay ingresos para pagar a tantos (no se dice que no sean necesarios).
Supongamos que sea cierta la razón. Entonces …
¿Por qué hay que prescindir sólo de los interinos y temporales y mantener a los funcionarios con independencia de su calidad?.
 
04.11.2012:
Otra cosa que toca ahora: decir que la economía USA se está recuperando.
De entrada, USA está sostenida por el resto del mundo: no puede pagar todo lo que debe: el abismo fiscal.
De salida, USA debería crecer al 5% durante 5 años para volver a niveles de desempleo de antes.
Pero como USA ha sido locomotora si se dice que se está recuperando se pueden decir otras cosas.
 
 09.11.2012
España: recortes, recortes, recortes y recortes; y subidas de impuestos: llegarán.
Toda la estrategia se fundamenta en eso: en no comer y dar esos alimentos en pago de lo que se debe.
¿Por qué?. España no crece: decrece; luego la actividad económica se reduce, el paro aumenta, el consumo (de todo) baja.
Se exporta lo que a España le compran, pero España depende de tantas cosas del exterior …
Se reducen gastos pero, ¿qué se está haciendo para aumentar ingresos?, es decir, para revertir este decrecimiento.
¿O es que es imposible y la única vía es el empobrecimiento, el adelgazar para pagar y para garantizar el pago de esa deuda?.
 
11.11.2012:
Una pregunta que hoy no es políticamente correcta:
De cada diez personas que entre el 2000y el 2007 firmaron hipotecas en las que figuraban ‘cláusulas abusivas´,
¿cuántas leyeron lo que firmaban o exigieron que se les informase sobre lo que estaban firmando?Esta parte de la película del ‘España ve bien’ nunca se cuenta porque, o bien su desenlace sería muy feo:
o bien una gran parta de los prestatarios resultarían ser unos desinteresados e ignorantes,
o bien una parte muy importante de las entidades financieras deberían ser calificadas de falsarias.
 
Ahora júntenlo todo. ¿qué sale?.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

Las únicas 3 maneras de que España pueda salir de la crisis

Parece que estamos viviendo un período de mayor optimismo sobre las perspectivas españolas, pero debemos abstenernos de unirnos a este sentimiento, ya que pronto se desvanecerá. En el gran debate sobre la economía, a veces nos olvidamos de la aritmética simple del reequilibrio económico. Esta aritmética, nos guste o no, limita severamente nuestras opciones. Durante muchos años, gracias en parte a las malas políticas en España, pero principalmente a los agresivos intentos de Alemania de conseguir crecimiento y superávit comercial a costa de sus vecinos europeos, España y muchos otros países de Europa, soportaron enormes déficits comerciales.
Es fácil culpar a la codicia de los españoles y a la incompetencia de los gobiernos por el lío en el que España se ha encontrado, pero las políticas que Alemania puso en marcha a finales de 1990 garantizaron que el país germano pasara de un enorme déficit a un masivo superávit.

Al entrar en el euro, los países perdieron, además de su moneda, la autonomía sobre los tipos de interés, y así fue inevitable que los países europeos con un nivel de inflación por encima de la media, se vieran obligados a responder a los excedentes comerciales alemanes, ya fuese aumentando el desempleo o forzando el consumo, corriendo con grandes déficits comerciales que procedían del superávit comercial de Alemania. No había otra opción.
Estos déficits tuvieron que ser financiados con préstamos procedentes de Alemania, dejando a España con una carga de deuda enorme. Como España no podía incurrir en un déficit comercial sin pedir prestado en el extranjero, sólo podía pagar su deuda si tenía un superávit comercial. Pero aún hay más, ya que los españoles ricos están sacando grandes cantidades de dinero del país, a fin de protegerse de la crisis de deuda que se avecina, el superávit comercial español debe ser lo suficientemente grande como para satisfacer tanto la fuga de capitales como los pagos de la deuda.
Michael Pettis, profesor de finanzas de la Universidad de Pekín y gurú económico, señala que en la práctica sólo hay tres maneras de que España pueda alcanzar un superávit comercial lo suficientemente grande.

La primera opción
La primera opción requiere que Berlín revierta  aquellas políticas que obligaron a un superávit comercial alemán a expensas de sus vecinos europeos. Alemania debe reducir sus impuestos y aumentar el gasto lo suficiente para que el país incurra en un déficit comercial lo suficientemente grande como para permitir que España incurra en el superávit opuesto, algo que debe hacer si quiere pagar su deuda.
Esto, por cierto, es exactamente lo que John Maynard Keynes  exigió hacer a EE.UU.  a finales de 1920 si se quería evitar una crisis global.  EE.UU. ignoró a Keynes, y la crisis se produjo justo como él predijo. Alemania, con la misma incomprensible obstinación que Estados Unidos en la década de 1920, se niega a hacer lo que es necesario para prevenir una crisis.
Pero, y este es el punto clave, si Alemania no se mueve rápidamente para revertir su superávit comercial, España sólo tiene dos formas de crear un superávit comercial a pesar de la obstinación alemana.

La segunda opción
En este camino exige que los salarios españoles sean cada vez menores por el elevado desempleo. Esto permitirá a España tener un superávit comercial lo suficientemente grande.
Si los salarios españoles caen en relación con los de Alemania, España podría tener un superávit comercial. Los productos españoles serán más competitivos en los mercados internacionales. Pero la verdadera razón de por qué España tendría un superávit comercial después de muchos años de desempleo, es porque los trabajadores españoles simplemente no tendrán mucho poder adquisitivo.

La tercera opción
La tercera opción de España es abandonar el euro y devaluar su moneda. Esto provocará una caída inmediata de los precios y los salarios en relación a Alemania.

Ninguna de estas  opciones será fácil, pero es importante que nos demos cuenta de que si Alemania no se ajusta, Madrid no tendrá más remedio que elegir. Ambas opciones harán que la deuda se eleve en términos reales, y probablemente obligará a las empresas españolas, e incluso al Gobierno, a entrar en default, pero en ambos casos España comenzará a tener amplios superávit comerciales.
Por mucho que los líderes en Madrid, Bruselas y Berlín odien admitirlo, estas son las únicas tres opciones abiertas para España. Cualquier otra propuesta política que no esté en consonancia con una de estas tres vía, no será posible.


El camino que han elegido
Por el momento, España ha elegido implícitamente la opción del desempleo, con la esperanza de que sea capaz de ajustarse en uno o dos años y, finalmente, reanudar la normalidad. Ningún país, después de todo, puede soportar el dolor que España está sufriendo hoy en día sin un grave deterioro en el aspecto social y político.
Sin embargo, la historia y el sentido común nos enseñan que la idea de que después de uno o dos años más de ajustes, España habrá resuelto sus problemas de deuda y de desempleo, no tiene sentido. Se tardará mucho más tiempo. Si España quiere seguir por el mismo camino, debemos estar preparados para sufrir al menos otros cinco años de desempleo extremadamente alto, una erosión de la capacidad productiva de su economía, y un caos político.
O puede dejar el euro. Dada la rapidez con la que el ambiente político se está deteriorando, hay muchas posibilidades de que esto ocurra. Lamentablemente, tendremos que esperar unos años más para que el Gobierno pueda impulsar una economía estable y mejore el aspecto social antes de que elija la devaluación. Pero con el tiempo así sucederá.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Solidaridad

Siempre he pensado que no se pude obligar a nadie a que sea solidario: se es solidario o no se es. Si en una época un conjunto de países ponen en marcha una política fiscal redistributiva con el objetivo de profundizar en la convergencia de rentas vía impuestos y gasto, en esa zona se estarán imponiendo unas medidas que buscarán la transferencia de quienes más tienen hacia quienes tienen menos, pero eso nunca será solidaridad.

A España lo que se ha dado en llamar solidaridad llegó tarde: a finales de los 70 en cuanto lo territorial y a principios de los 80 atendiendo a lo individual; y, al revés de lo sucedido en Europa nunca estuvo vinculado al crecimiento -muy posiblemente porque quienes pusieron en marcha el esquema se apercibieron de que el crecimiento sostenido del conjunto España era imposible-, y sí a las posibilidades de algunos para generar y, vía ‘solidaridad’, traspasar a quienes menos crecían o no crecían.

La solidaridad siempre ha de estar sustentada en el crecimiento: siempre. El reparto de lo escaso no es solidaridad, máxime si resta posibilidades de crecimiento a quien realmente puede crecer y no da prácticamente ninguna a quien se transfiere por carencias estructurales que las transferencias no pueden paliar. Y en España esa política ha fracasado estrepitosamente: quienes dan han podido crecer menos que si hubieran dado menos; luego se ha transferido PIB sin beneficio conjunto: eso, pienso, no es solidaridad.

Evidentemente, cuando llegó la fase del ‘España va bien’ y del ‘España va más que bien’ la problemática anterior casi desapareció: la ficción del café para todos casi se hizo creíble porque había para muchos ya que en todas partes todo crecía; en todas partes: el 0,9% de su PIB, de media, ha estado percibiendo España de Europa durante el tiempo que ha estado percibiendo . Claro, claro, ni se vio ni se quiso ver que todo aquello era ficción sostenida sobre una base de crédito levantada sobre una solera de ilógica capacidad de endeudamiento, pero el PIB aumentaba y España era la ‘novena economía del mundo’ y ‘jugaba en la liga de la economía de las estrellas’.

La clase media, aquel invento que Europa y USA empezaron a fraguar en los 50 y que se masificó en los 60, a España llegó en los 90, pero cierto es: saltó directamente al Ibiza Cupra sin pasar por el 4-4. (El 600, el Gordini, fueron sueños sin continuidad: comparen sus precios con las rentas de entonces y añadan que en aquel entonces crédito no lo tenía nadie). Pero esa falsa clase media española no se basó en el crecimiento real, con base y homogéneo, sino en otra cosa que cuando se ha acabado …
Ya lo hemos dicho, pero repitámoslo: desde mediados de los 80 la tasa de pobreza en España ha permanecido estancada: en los mejores momentos del más que bien tan sólo se redujo hasta el 18,5%, y el desempleo tan sólo descendió hasta el 7,8%. (Hoy, en lo más peor de la crisis Austria tiene situado su desempleo en el 4,4%). En esas circunstancias es factible quitar a unos para dar a otros, pero esas circunstancias demuestran que el crecimiento armónico y uniforme no es posible. Y no lo es porque las posibilidades reales y verdaderas de unos no lo permiten.

La época del ‘España va bien’ no fue, repito: no-fue, lo normal, sino lo atípico, el punto aberrante al que se refieren los estadísticos. Y no, lo de ahora tampoco es lo normal para España. Lo ‘normal’ es crecer menos y según posibilidades, y a partir de aquí plantear realidades.
Y no: ninguna solidaridad puede revertir eso. Absolutamente ninguna.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

La Bolsa en 2013 ¿Nos Vamos a Dar de Comer a los Peces?

El repunte de los mercados bursátiles mundiales, que comenzó en julio está perdiendo fuerza, lo cual no es ninguna sorpresa: sin una mejoría significativa en las perspectivas de crecimiento, ya sea en las economías avanzadas y emergentes, el rally siempre ha tenido los pies de barro. En todo caso, la corrección podría haber llegado antes, teniendo en cuenta los decepcionantes datos macroeconómicos de los últimos meses.

El famoso economista y profesor de la Universidad de Nueva York Nouriel Roubini, repasa, comenzando con los países avanzados, los problemas a los que se enfrentan los inversores. La recesión de la zona euro se ha extendido desde la periferia hacia el centro, con Francia y Alemania entrando en una doble recesión en su mercado de exportación (China / Asia) y una contracción absoluta en los demás (sur de Europa). El crecimiento económico en Estados Unidos se ha mantenido anémico, entre el 1,5-2% durante la mayor parte del año, y Japón está cayendo en una nueva recesión. El Reino Unido, al igual que la zona del euro, ya ha experimentado una doble recesión, y ahora incluso los mayores países exportadores de productos básicos - Canadá, los países nórdicos y Australia - se están desacelerando lastrados por EE.UU., Europa y China.
Mientras tanto, las economías de los mercados emergentes - incluyendo todos los países del BRIC (Brasil, Rusia, India y China) y otros actores importantes como Argentina, Turquía y Sudáfrica - también se han desacelerado en 2012. La desaceleración de China se ha estabilizado en los últimos trimestres, ante la última inyección fiscal, monetaria y de crédito del Gobierno, pero este estímulo sólo perpetua ese modelo de crecimiento insostenible, basado en demasiada inversión fija y el ahorro y muy poco consumo privado.
En 2013, los riesgos a la baja para el crecimiento mundial se ven agravados por la propagación de la austeridad fiscal a las economías más avanzadas. Hasta ahora, el lastre fiscal se ha concentrado en la periferia de la eurozona y el Reino Unido. Pero ahora está penetrando en el núcleo de la eurozona. Y en los EE.UU., incluso si el presidente Barack Obama y los republicanos en el Congreso alcanzan un acuerdo sobre un plan de presupuesto que evite el inminente "acantilado fiscal". Los recortes de gastos y los aumentos de impuestos provocarán inevitablemente algún lastre para el crecimiento en 2013 - por lo menos del 1% de PIB. En Japón se eliminará el estímulo fiscal de la reconstrucción post-terremoto.

El Fondo Monetario Internacional tiene toda la razón al argumentar que la excesiva austeridad fiscal sincronizada en la mayoría de las economías avanzadas, sugiere unas sombrías perspectivas de crecimiento mundial en 2013. Por lo tanto, ¿qué explica el reciente repunte en los mercados bursátiles estadounidenses y mundiales?
La respuesta es simple: los bancos centrales han vuelto a regar al mercado con liquidez, dando un renovado impulso a los activos de riesgo. La Reserva Federal de EE.UU. ha adoptado una flexibilización cuantitativa (QE) agresiva. El anuncio del Banco Central Europeo, de su programa de compras de bonos ha reducido el riesgo de una crisis de deuda soberana en la periferia de la eurozona y una ruptura de la unión monetaria. El Banco de Inglaterra ha pasado de QE a CE (credit easing), y el Banco de Japón ha aumentado varias veces el tamaño de sus operaciones QE.

Las autoridades monetarias de muchas otras economías avanzadas y de mercados emergentes, también han recortado sus tasas de interés. Y, con un crecimiento lento, una inflación moderada, unos tipos de interés de corto plazo de casi cero, y más QE, los tipos de interés a más largo plazo seguirán bajas (con la excepción de la periferia de la eurozona, donde el riesgo soberano sigue siendo relativamente alto). No es de extrañar, entonces, que los inversores busquen desesperadamente una mayor rentabilidad y se han apresurado a comprar valores de renta variable, materias primas, instrumentos de crédito y divisas de mercados emergentes.
Pero ahora se ha puesto en marcha una corrección del mercado mundial, debido, sobre todo, a las pobres perspectivas de crecimiento. Al mismo tiempo, la crisis de la eurozona sigue sin resolverse, a pesar de las acciones audaces del BCE y las conversaciones para conseguir una unión bancaria, fiscal, económica y política. En concreto, Grecia, Portugal, España, Italia y todavía están en riesgo, mientras que el núcleo de la eurozona está cansada de tanto rescate.
Por otra parte, las incertidumbres políticas y monetarias - sobre la deuda, fiscalidad, impuestos, y los frentes legislativos - abundan. En los EE.UU., las preocupaciones fiscales son tres: el riesgo de un "precipicio" en 2013, ya que los aumentos de impuestos y recortes masivos del gasto comenzarán automáticamente si no se alcanza un acuerdo político; el combate por el techo de la deuda, y una nueva lucha sobre la austeridad fiscal a medio plazo. En muchos otros países o regiones - por ejemplo, China, Corea, Japón, Israel, Alemania, Italia y Cataluña - las próximas elecciones o transiciones políticas también han aumentado la incertidumbre política.

Otra razón para la corrección es que las valoraciones en los mercados bursátiles son cada vez más exigentes: la relación precio / ganancias es alta, mientras que el crecimiento del beneficio por acción está descendiendo, y estarán sujetas a más sorpresas negativas ya que el crecimiento y la inflación siguen siendo bajos. Con estos riesgos en el radar de los inversores, la corrección podría acelerarse rápidamente.

De hecho, en la actualidad hay una mayor incertidumbre geopolítica, así: el riesgo de una confrontación militar entre Irán e Israel sigue siendo alto ya que las negociaciones y las sanciones no pueden impedir que Irán desarrolle armas nucleares; es probable una nueva guerra entre Israel y Hamas en Gaza, la primavera árabe se está convirtiendo en un invierno sombrío de inestabilidad económica, social y política, y las disputas territoriales en Asia entre China, Corea, Japón, Taiwán, Filipinas y Vietnam están inflamando las fuerzas nacionalistas.

Los consumidores, las empresas y los inversores se han vuelto más cautelosos y reacios al riesgo y así, el rally del mercado de las acciones de la segunda mitad de 2012 ha tocado techo. Dada la gravedad de los riesgos sobre el crecimiento en las economías avanzadas y emergentes, la corrección podría señalar que lo peor para la economía mundial y los mercados financieros en 2013 todavía está por llegar.
Fuentes: Nouriel Roubini

“Endeudamiento familiar vs efecto dominó: padres y abuelos soportan hipotecas de hijos y nietos…”

"De Norte a Sur, de Este a Oeste, y ahora que tanto se habla de desahucios y demás tragedias engendradas por el excesivo endeudamiento del Estado, Autonomías, Corporaciones, Empresas, Familias e Individuos, el lamento es el mismo: son muchos los padres y abuelos los que están soportando las cargas hipotecarias y otras cargas de deuda contraídas por hijos y nietos, en lo que es un efecto dominó irreversible en la mayoría de los casos. Años después, se confirma el peor de los augurios: la sociedad española ha hipotecado a los hijos de nuestros hijos y a los nietos de nuestros nietos. Estados, empresas, familias e individuos componen la Deuda Total. Repare en el término, estimado director, porque ni los políticos ni otros medios lo consideran. Pero es la principal clave: la Deuda Total, que en el caso español supone más de tres veces (3) el PIB. Lo que usted, estimado director, lee y escucha, como yo y como el resto de los escuchantes, es el ratio deuda del Estado respecto al PIB, o ese mismo ratio de empresas, familias o individuos respecto al PIB. La segregación, parte por parte, hace que salgan algunos números, que cuadren determinadas cifras. Pero eso es hacerse trampas en el solitario, un juego al que los principales Organismos Internacionales ya no se prestan. O al menos, como lo han venido haciendo hasta hace poco, como hemos sabido en EE UU y Grecia, por citar algunos ejemplos. Se sigue mirando hacia otra parte, pero cada vez menos, porque el cuello de los Reguladores ya no tiene músculo. La Deuda Total atenaza al Mundo Global ¿No le resultan curiosas las afirmaciones de última hora provenientes de Alemania, que insisten en que el país ha vivido por encima de sus posibilidades y que Europa necesita otros cinco años de sangre, sudor y lágrimas? Sí, lo ha dicho Merkel.Y yo me digo a mi mismo, si Alemania entona el mea culpa ¿qué debemos entonar nosotros? No, no podemos seguir viviendo por los siglos de los siglos del dinero de los demás. Y a eso se le llama Deuda Total", me escribe L. Andrés Gómez, economista.
"Endeudados hasta las cejas. La deuda externa es la suma de las deudas que tiene un país hacia entidades extranjeras. Se componen de deuda pública (la contraída por el estado) y deuda privada (la contraída por particulares). La deuda externa con respecto a otros países se da con frecuencia a través de organismos como el Fondo Monetario Internacional o el Banco Mundial. Cuando un país deudor tiene problemas para pagar su deuda (esto es, para devolverla junto con los acordados intereses) sufre repercusiones en su desarrollo económico e incluso en su autonomía...", añade.
"El principal argumento para que un país contraiga una deuda es que teóricamente permite conservar los recursos propios y recibir recursos ajenos para explotar, procesar o producir nuevos bienes y servicios. Sin embargo, esto se vuelve un problema cuando dicho dinero no se utiliza en aquello para lo que fue solicitado, cuando se usa de manera ineficiente o cuando las condiciones de devolución se endurecen (principalmente a causa de anteriores incumplimientos del deudor...", finaliza.
 
Y ahora los siguientes enlaces:
España sigue en el punto de mira de los medios internacionales.  Bloomberg aprovecha un informe sobre desahucios del mes pasado para retratar el maltrecho panorama de la vivienda. El incremento de los embargos en los últimos años y sus afectados ocupan la atención de la agencia de noticias. El recrudecimiento de la crisis económica y financiera y el deterioro del mercado laboral están haciendo crecer el número de ejecuciones hipotecarias a niveles nunca vistos.
Empresarios que pierden sus negocios y sus casas, que tenían como aval. Padres que se quedan sin el "hogar para el que han trabajado durante años" por figurar como avalistas de sus hijos, también desahuciados... Esta es la imagen de España que reproduce la agencia de noticias financieras Bloomberg, que destaca además que el fenómeno se está desplazando también desde la periferia hasta el centro de las principales ciudades.

Los perfiles

En su informe, AFES, una asociación de asesoramiento a embargados, destacaba cómo ha evolucionado el perfil de afectados por un proceso de ejecución hipotecaria y ponía de manifiesto que mientras antes eran los inmigrantes los que copaban la mayor parte de impagos, ahora el problema se da también en familias de rentas altas.
En concreto, afirmaba que el número de empresarios y familias de rentas altas que han tenido que afrontar un desahucio de sus bienes se incrementó en un 200% en los seis primeros meses del año.
"Han podido resistir la pérdida de empleo de uno o más miembros de la familia durante algún tiempo gracias a su solvencia económica o venta de propiedades, pero han acabado por agotar sus recursos", apuntaban desde AFES. De esta forma, ya representan el 60% del total, frente al 40% que supone la población inmigrante. Hace tres años, los inmigrantes copaban el 80% de las ejecuciones.
Carlos Baños, presidente de AFES, destaca que los casos  "más tristes" son los de los padres avalistas. "Los hijos pierden su casa y se van a vivir con sus padres, que también pierden su casa porque respaldaron las deudas de sus hijos", explica.

"Bomba de relojería"

La solución de la "crisis hipotecaria", como la denomina Bloomberg, parece difícil, teniendo en cuenta que Rajoy tiene que aunar la lucha contra el déficit presupuestario con una recesión y con las consecuencias del estallido de la burbuja inmobiliaria.
"La mezcla de subidas de impuestos con la desaparición de incrementos salariales y el encarecimiento de la energía y los alimentos hace mella en la renta disponible de las familias y representa un riesgo creciente a la hora de pagar los créditos", explica a la agencia Raj Badiani, economista de IHS Global Insight.
De acuerdo con los últimos datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), hasta junio de este año se firmaron 23.421 ejecuciones hipotecarias, 257 sentencias cada día. Además, el número de lanzamientos (procedimientos de desahucio, posteriores a la ejecución hipotecaria) alcanzó los 18.668, un récord histórico.
Pero las cifras pueden ir a peor. "Las recientes medidas de austeridad, que incluyen dos reformas laborales que abaratan el despido de trabajadores tradicionalmente seguros aumentarán el número de impagos de hipotecas", concluye el experto de IHS Global Insight.
Desde Idealista detectan un agravante más: los tipos de interés. Según Juan Villen, responsable de hipotecas del portal inmobiliario, el bajo nivel en el que se encuentran ahora está ayudando a retrasar ejecuciones hipotecarias, pero es una "bomba de relojería" que estallará cuando la recuperación comience en otros países de la zona euro y los intereses vuelvan a elevarse.
 

Hay más enlaces. Todos cortados por el mismo patrón.

lacartadelabolsa

martes, 20 de noviembre de 2012

Horizonte

Recibo un mail de esos que lees dos veces antes de responder, la segunda muy, muy despacio:
"Le vengo siguiendo desde hace varios meses y se me ha quedado grabado una frase que dice usted mucho y que se está cumpliendo constantemente. "Se hará lo que tenga que hacerse en cada momento".
Ahora bien, el otro día al visitar una empresa que, creía yo, estaba ampliando instalaciones por que le iban bien las cosas, resulta que un alto cargo de dicha empresa me comunicó que no les van bien los números, que de hecho van muy mal, pero que tienen orden de la central en Europa, de gastar el dinero en cosas tangibles, aunque no se las vaya a dar uso en estos años, ni se vayan a alquilar.
Están comprando terrenos en España, en Turquía, Centroeuropa, etc. Comprando hierro y otras materias primas sin necesitarlas a corto ni medio plazo. Siempre en bienes tangibles. Al parecer dicen que el sistema financiero es inestable y que no quieren papelitos que en un momento dado no sirvan para nada.
Es decir, tienen miedo a un colapso financiero o a una hiperinflación brutal.
La pregunta es si no se contradicen ambos argumentos, ya que siendo malo el suyo, el de ellos es pavoroso".
Mi respuesta fue muy meditada:
"Es lógico lo que dicen, y no se contradice con lo que digo yo: tienen excedentes de liquidez y prevén que vamos hacia un escenario de escasez de commodities, y se preparan.
Por lo que dice deduzco que se trata de una gran corporación o de una multinacional que trabaja para grandes corporaciones.
Colapso financiero, pienso que no: ¿a quién le interesa?, es mejor intervenir coordinadamente; hiperinflación, pienso que tampoco: la demanda se reducirá y aunque crezcan los precios para frenarla aún más, de eso a la hiperinflación media bastante. Lo que habrá es poco para  pagar lo que se compre, de ahí que esa compañía de la que habla se prepare".
Tiene verdadera miga. Y el mensaje es claro: 'no va a haber' por lo que si ahora hay, hay que hacer para tener.
El sistema financiero pienso que no colapsará, pero 'el dinero' tal y como lo conocemos ... como que no.
Lo que está haciendo esa empresa es acertado: saldrá quien tenga cosas necesarias para hacer cosas necesarias; y en un entorno de escasez. Lo demás ...
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Cortos en el mercado americano!!!!


Mirad el pull back a la media de 200 del sp500, yo entro corto en el ETF inverso del sistema bancario apalancado por 3. (FAZ)

Suerte a tod@s

sábado, 17 de noviembre de 2012

Consultorio Bursatil Sr. Saez del Castillo 16-11-12



Archivo de Audio de Analisis Técnico, grabado de Radio Intereconomia el Viernes 16 de Noviembre del 2.012 a las 9:40 horas, con la participación del Sr. Saez del Castillo de Gesmovasa.com, nos ofrece un analisis delIbex 35 y varios Indices, nos comenta cual es el escenario más probable de cumplirse y nos analiza en el consultorio los siguientes valores, en este orden: Banco SantanderSP500GamesaBanco Popular y sus recomendaciones y consejos para invertir. fuente: http://www.blog-wallstreet.com/

viernes, 16 de noviembre de 2012

Turismo

¡¡¡¡TURISMO!!!! Esa es la solución a todos los males de la economía española. El turismo es y va a continuar siendo la panacea para lograr la recuperación de la economía española y la salida de ‘la crisis’. Ese es el mensaje oficial, pero, ¿es y será así?.
Ese mensaje oficial: Gobierno central, Gobiernos regionales, Gobiernos locales, Cámaras de Comercio, Asociaciones, siempre se refiere a dos parámetros: número de turistas entrados -fundamentalmente- e ingresos totales por turismo -menos frecuentemente- en el período considerado. A eso suele añadirse las procedencias de esos turistas llegados. Nada más. Pero, ¿debe ser eso todo?.
 Pienso que en relación al turismo el dato fundamental, el básico, el que debería potenciarse y el que tendría que marcar y definir la política turística debería ser el gasto medio por turista, y siempre en valor constante de un año de referencia a fin de ver su evolución y, así, poder tomar decisiones.
 En el gráfico que viene a continuación, elaborado con datos tomados del INE, queda reflejada la realidad del turismo español: en dinero constante, en este caso en euros del 2002, y desde tal año, año tras año han entrado más turistas en España, pero año tras año cada uno de ellos, en términos medios, ha gastado en España menos dinero:
Esa es la realidad pura y dura del Subsector Turismo español: precisa la entrada de cantidades ingentes y masivas de turistas a fin de que la cantidad total gastada sea enorme, y esa suma necesita que crezca de forma indefinida debido a que la suma media que cada uno de esos turistas entrados deja es decreciente en lo que importa: en valores constantes.
 Triste, ya. El tan cacareado turismo que visita España se basa en la masa, en el número, en el volumen, no en la calidad ni el poder adquisitivo. Y los costes que generan esas ingentes masas de turistas que nos visitan, ¿dónde y como se cuantifican?. Para preguntar a quienes quieren que cada vez vengan más turistas.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

El indicador más famosos del mundo amenaza Wall Street ¿Hay que estar aterrorizado?

El mercado de acciones de Wall Street ha perdido la media móvil de 200 sesiones de una manera decisiva. Según muchos analistas técnicos, esto significa que la tendencia del mercado se ha girado a bajista. Pero, ¿sirve realmente de algo fijarse en la media de 200 sesiones para pronosticar la tendencia futura?
Este tema comenzó a ser conversación recurrente en las mesa de los operadores de Wall Street hace una semana, cuando el Dow Jones Industriales y el Nasdaq Composite cayeron por debajo de sus medias respectivas de 200 días.
Sin embargo, debido a que el S&P 500 - hasta la sesión del martes - había estado coqueteando con la ruptura de su media dentro de un intervalo de dos puntos, los "toros" podían argumentar que era prematuro preocuparse demasiado.
Pero, tras el cierre del martes, el nivel de referencia más seguido del mundo fue perforado por más de 7 puntos, y por lo tanto ya es un tema que no se puede ignorar.

La última vez que los principales mercados cayeron por debajo de sus respectivas medias de 200 días fue el pasado mes de junio. Lejos del anunciado mercado bajista, la violación técnica marcó el suelo de la corrección  mayo-junio. El mercado se recuperó después y logró anotarse una ganancia porcentual de dos dígitos durante los siguientes tres meses.
Para saber si esto es más la excepción que la regla, de nuevo a prueba, el reputado analista Mark Hulbert ha realizado un estudio sobre la media móvil de 200 días desde finales de 1800, cuando se creó el Dow Jones.
Hulbert ha creado una cartera hipotética con la premisa de estar totalmente invertido cada vez que el Dow supere su media de 200 días, y estar fuera del mercado cuando el Dow perdiera la misma media. Señalar que Hulbert no cuenta la rentabilidad por dividendo cuando tiene acciones, ni la rentabilidad que podría obtener en un depósito cuando se encuentra en liquidez. Tampoco tiene en cuenta las comisiones de compra y venta.
Los resultados fueron impresionantes: La hipotética cartera ligada a la media de 200 días obtuvo una rentabilidad del 6,7% anual durante un período de 116 años, frente al 5,1% de rentabilidad anual si hubiera comprado y mantenido.
El rendimiento ajustado al riesgo fue incluso mejor, ya que la cartera estaba fuera del mercado una buena parte del tiempo y por lo tanto tenía un riesgo mucho menor que la estrategia de comprar y mantener.
Por desgracia, el impresionante historial de esta cartera basada en la media de 200 días se debe a las primeras décadas del siglo pasado. Desde 1990, en cambio, la hipotética cartera habría dado una rentabilidad de sólo un 3,6% anualizado, frente al 7,0% anualizado si hubiera comprado y mantenido. El interés que hubiera dado el dinero en liquidez cuando no se estaba invertido en acciones no hubiera compensado esa diferencia.
¿Son las dos últimas décadas una aberración de la tendencia? Los investigadores académicos no tienen ninguna razón para pensarlo.
Por el contrario, creen que es totalmente plausible que la media móvil de 200 días dejó de funcionar debido a su creciente popularidad - matando a la gallina de los huevos de oro.
La conclusión: Si usted tiene razones para creer que las dos últimas décadas fueron una mera excepción, y que el siglo anterior es la regla, entonces usted debería estar vendiendo sus acciones de renta variable en este mismo momento.
Pero, si usted piensa que las dos últimas décadas constituyen la nueva normalidad, entonces usted no debería preocuparse por la multitud de artículos que han salido, están saliendo y saldrán a la luz, advirtiendo sobre la pérdida de la media de 200 sesiones.
Fuentes: Mark Hulbert

jueves, 15 de noviembre de 2012

¿Qué van a hacer las bolsas? Un gráfico vale más que 1000 palabras

A veces una imagen vale más que mil palabras. En el caso del gráfico que adjuntamos (vía Tyler Durden), se pintan las expectativas para el S&P 500 en los próximos meses si repite la pauta estacional de los últimos cuatro años. Podemos admirar la extraña simétrica exponencial que refleja la codicia y el miedo provocado por las maquinaciones de un cartel de bancos centrales cada vez más impotente.
 
Lo irónico es que probablemente hasta que no se desplome el mercado no habrá una solución al gran problema que nos aqueja actualmente: el acantilado fiscal.
Y es que según la teoría de Juegos, la solución al "acantilado fiscal" sería un crash del mercado bursátil. Es probable que tanto Demócratas como Republicanos no alcancen un acuerdo hasta que no se vean totalmente "comprometidos".
Se supone que cuanto más nos acerquemos a la fecha límite y más caigan las acciones, los gobernantes se verán más "obligados" a aceptar un acuerdo - por ejemplo, los republicanos estarían dispuestos a elevar los impuestos a algunas porciones de la población y los demócratas extendiendo las tasas marginales actuales.
Con el S&P cotizando tan solo un 7% por debajo de sus máximos y a siete semanas para que comience 2013, ni el presidente Obama ni el líder de los republicanos en la Cámara baja, John Boehner, tienen muchos motivos para moverse de sus férreas posturas, a pesar de la reciente retórica de acercamiento y buena fe.
Pero ¿qué pasaría si quedara una semana para que entre en vigor las medidas fiscales automáticas y el S&P 500 se está desplomando? Seguro que ambas partes estarían más comprometidas a llegar a un acuerdo y eso provocaría un fuerte rebote de los mercados de acciones.

Desempleo del factor trabajo

El pasado 31 de Octubre Eurostat publicó su comunicado 155/2012 sobre euroindicadores refiriéndose el referido al desempleo a 30 de Septiembre. La superenorme ventaja de este comunicado al igual de todos los que el organismo estadístico europeo elabora sobre el paro es que maneja datos verdaderamente reales. En el comunicado figuraba un gráfico absolutamente interesante:
El informe añadía que a 30.09 la tasa de paro en USA era del 7,8% y del 4,2% en JPN.
 ¿Qué conclusiones pueden extraerse de este gráfico. Pues bastantes:
  • Las medias son malas, tanto de la UE27 como de la UEM: 10,6% y 11,6%, y eso es muchísimo se mire como se mire, y no permiten, en absoluto, hablar de que tales registros son debidos a una mala coyuntura.
  • Los saltos ‘por grupos’ son apreciables: 5,4% à 6,4%; 8,4% à 10,0%; 10,8% à 11,6% à 12,2%; 12,9% à 13,9% à 15,1%. Y luego, en otra galaxia, Grecia y España. ¿Qué indican esos saltos?, pues que en Europa no existe una sola realidad, sino varias porque existen varias economías que funcionan a diferentes velocidades. Y cuanto antes se asuma esto, más fácil será abordar las cosas necesarias que hay que abordar.
  • España …, bueno; tiene una tasa de desempleo más que elevadísima, ya, pero con ser eso horrible pienso que lo peor no es eso, sino que la diferencia que existe entre España y Austria, la economía que la tiene menor es de 21,4 puntos, de hecho la tasa de paro española quintuplica la austríaca.
  • Pero es que, siguiendo con España, la cosa no es sólo eso. Comparando la tasa de paro española con los saltos antes referidos, vemos que son monstruosos refiriendo la tasa de España con la de países de su entorno: 15 puntos más que Francia e Italia, ya no vayamos a medirla con Suecia o Países Bajos.
 Pienso que pensando en un escenario postcrisis dos son las metaconclusiones que a día de la fecha pueden perfilarse en relación al desempleo del factor trabajo:
 1 – Que, en base a una red de zonas de actividad que se establecerá, van a definirse, pienso, unas realidades muy, muy diferentes. Formalmente la UE o la UEM seguirán existiendo y elaborando políticas de coordinación, pero a efectos prácticos serán esas zonas, más o menos extensas, las que llevarán el peso de la economía.
 2 – En España pinta un panorama laboral muy, muy negro si se conservan los actuales parámetros. Una tasa de desempleo del 25,8% lo que está indicando es que, al margen de paro encubierto y del subempleo, existe una fracción de la población activa que no es necesaria. Y que, previsiblemente, no va a serlo en un futuro acotable en el tiempo.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.

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