viernes, 15 de enero de 2010

Del Rivero alardeaba de que iba a quitar a Brufau

El presidente de Sacyr, Luis del Rivero, tiene un sueño: quiere el sillón de Antonio Brufau. Así lo ha ido gritando a los cuatro vientos, al menos en los últimos meses, tanto en bancos de inversión como en círculos reducidos.

En medios sociales y empresariales, Del Rivero no ha escatimado en comentarios sobre sus discrepancias con el presidente de la petrolera. Es más, el ejecutivo murciano ha llegado a asegurar en privado que "en la primavera Brufau ya no estaría en la presidencia de Repsol (REP.MCREPSOL YPF
18,780 +0,43% +0,08
Última noticiaDel Rivero alardeaba de que iba a quitar a Brufau Ver más resumen noticias perfil recomendaciones / consenso gráficos carteras histórico )".

Rápidamente, su 'candidatura' comenzó a correr como la pólvora en medio Madrid. El propio Del Rivero se encargó de que así fuera. El ejecutivo murciano entendía que sus decisiones deberían tener más peso en el seno de Repsol por ser el mayor accionista y añadía que en caso de que no estuviera de acuerdo con la gestión podría incluso tomar el mando y nombrar un presidente o un ejecutivo, al igual que hizo La Caixa, cuando con un 12,5% del capital eligió a Brufau. Del Rivero parece que no tuvo en sus cálculos el respaldo cerrado que al menos hasta el momento le ha brindado La Caixa a su ex director general.

Sacyr (SYV.MCSACYR
9,012 +1,03% +0,09
Última noticiaDel Rivero alardeaba de que iba a quitar a Brufau Ver más resumen noticias perfil recomendaciones / consenso gráficos carteras histórico ) se ha quejado en los últimos dos meses sobre la forma de dirigir la compañía que tiene Brufau -muy presidencialista- y le acusa de no respetar al primer accionista lanzándole ataques en una visita a Brasil.

En el consejo de administración de hoy, Del Rivero podrá poner sobre la mesa sus críticas, si así lo desea, ya que hay un punto explícito en el orden del día, pero el riesgo de sufrir una derrota clamorosa en la votación podría arrojar resultados sorprendentes.

En el fondo de esta guerra, no obstante, tanto bancos de inversión como analistas y sindicatos, consideran que hay un claro intento por parte de Sacyr de rebajar su asfixia financiera utilizando los activos de la petrolera, una opción que Brufau no está dispuesto a tolerar y para la que cuenta con el apoyo de La Caixa, los sindicatos, los accionistas minoritarios y los socios argentinos.

Las perlas del presidente de Sacyr sobre Brufau han llegado incluso a deteriorar la relación personal entre ambos y Del Rivero se ha llegado a referir sobre el presidente de Repsol como su "empleado" en un encuentro privado que tuvo lugar con motivo de la visita de una autoridad argentina.

Hay que recordar que el presidente de la constructora -que ya intentó en su momento el asalto al BBVA y a Eiffage y fracasó en todos ellos- ha querido mandar en la petrolera desde que entró en 2006. Llegó incluso a plantearse la posibilidad de lanzar una oferta de compra por Repsol, pero no logró la financiación necesaria al no concitar la confianza suficiente en el mercado, ni en su gestión. De hecho, incluso ahora varios informes de analistas han mostrado su férrea oposición a una hipotética toma de la presidencia por parte de Luis del Rivero.

No hay comentarios :

Publicar un comentario

m